Justicia10/11/2022

Caso Jimena Salas: Ex funcionaria confirmó la coartada del “Chino” Saavedra y denunció amenazas

La ex ministra de Desarrollo Social, Verónica Figueroa denunció que fue víctima de una amenaza por su testimonio en la causa por el femicidio de Jimena Salas, donde testifica que estuvo el fin de semana del asesinato trabajando en un festival comunitario junto a Javier “Chino” Saavedra.

La mujer contó que trabaron el portón de su casa y escribieron “Javier” en su auto. Por otra parte, informó que actualmente hay una presentación de un padre de la Orden Franciscana ante la CIDH, patrocinada por Carlos Antonio Romano, donde se denuncian reservas en el debido proceso, torturas y apremios ilegales contra Saavedra.

Verónica Figueroa estuvo en el programa De Buena Fuente y afirmó que es testigo en la causa que investiga el crimen de Jimena Salas, por haber trabajado el fin de semana del asesinato junto a Javier “Chino” Saavedra, el principal acusado de ser el autor del asesinato.

“Yo era subsecretaria de Desarrollo Humano de la Municipalidad de Salta y trabajábamos en V° Floresta. En ese tiempo yo había convocado a trabajadores sociales de UCASAL para realizar prácticas profesionales y llevamos a cabo el Plan Hábitat”, sostuvo la coordinadora ejecutiva de fundación Por los Niños.

“En la primera etapa, (Saavedra) trabajó con nosotros haciendo diagnósticos, junto a diez chicos En el 2017 hicimos el cierre de muchas actividades sociales”, recordó Figueroa y destacó la presentación de una orquesta que realizó en conjunto con una Iglesia Evangélica. “El fin de semana que fue asesinada Jimena, nosotros hicimos un festival de música y estuvimos -con Saavedra- viernes y sábado trabajando en el festival”, aseguró.

En este sentido, la ex ministra de Desarrollo Social aseguró que fue citada a declarar. “Fue un evento del barrio, había muchísimas personas y todos los que participaron estuvieron buscando imágenes, fotos, las filmaciones de las cámaras en el barrio. En este momento, está en ese proceso”, sostuvo en relación a la causa y las fuentes que acreditan la presencia de Saavedra.

Además, aseguró que los pastores y miembros de la comunidad evangélica están a disposición de brindar su testimonio de los hechos y que no lo pudieron hacer antes porque se encontraban viajando por sus tareas religiosas.

Figueroa sostuvo que Saavedra “no tuvo debido proceso” y remarcó que al respecto, actualmente existe una presentación en la Corte Interamericana de Derechos Humanos del padre Martín Caserta, de la Orden Franciscana, que además cuenta con el patrocinio del jurista Carlos Antonio Romano. En la misma se denuncia vejaciones, apremios ilegales y tortura a Javier “Chino” Saavedra.

En este sentido, la entrevistada contó que acompañó a la mamá de Saavedra a realizar una presentación ante el Comité Provincial para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanas o Degradantes.

Por tu testimonio en la causa y acompañamiento ante el organismo, Figueroa denunció que fue víctima de un amedrentamiento. “Me vinieron a asustar, me golpearon las puertas de mi casa, me trabaron el portón y me escribieron en mi auto el nombre de Javier”, sostuvo.

“Creo que tenemos que hacer que la justicia exista y si me tocó en esta causa ser testigo, tengo que decir lo que sé, tal cual lo sé, sin ningún tipo de pensamiento mío que lo vuelva subjetivo. Tengo que decir que hizo tal tarea y estuvo en tal lugar y no voy a dejar de decir lo que veo con total honestidad. Después la justicia tiene que hacer su análisis, garantizando el debido proceso por Javier, por Jimena, y por todas las personas”, sentenció Figueroa.