Sin Alberto Fernández, funcionarios del kirchnerismo recibieron a la Selección
Con la Casa Rosada vacía y sin Alberto Fernández, funcionarios del kirchnerismo se encargaron de recibir a la Selección argentina de Lionel Messi en la llegada a Ezeiza que fue durante la madrugada de este martes. El Ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro -responsable de Migraciones-, fue uno de los presentes.
La Directora Nacional de Migraciones, Florencia Carignano, el director de la PSA, José Glinsky, el director General de Aduanas, Guillermo Mitchell -que viene del Frente Renovador de Sergio Massa- fueron los otros funcionarios que estuvieron en la pista de aterrizaje para recibir la Copa del Mundo. Junto a ellos estuvieron el presidente de Aerolineas Argentinas, Pablo Ceriani, el embajador de Qatar en el país y el CEO de Aeropuertos Argentina 2000, Daniel Ketchihvachian.
Eduardo "Wado" de Pedro es el ministro favorito de Cristina Fernández de Kirchner y tal vez el principal candidato del kirchnerismo para competir en una PASO por la sucesión de Alberto Fernández. Las autoridades de los distintos organismos que intervienen en el aeropuerto de Ezeiza supervisaron junto a de Pedro el operativo de arribo de la Selección Argentina campeona y sus familiares con la participación de las máximas autoridades.
Además, los empleados de todos estos organismos realizaron una “Guardia de Honor” en la alfombra roja a los jugadores en pista. Todo el personal y autoridades actuaron con la premisa de no demorar ni entorpecer la llegada del plantel sino de facilitar y agilizar su arribo y salida del aeropuerto ante miles personas que los esperaban a lo largo de la autopista Riccheri para saludarlos. Asimismo, migraciones dispuso también de un operativo especial desde las 22 de anoche para agilizar el trámite de familiares.
El seleccionado argentino con Lionel Messi portando la Copa del Mundo conseguida en Qatar llegó a las 4.15 al predio de la AFA luego de recorrer en una hora y cuarto el trayecto que normalmente demanda 10 minutos desde el aeropuerto de Ezeiza, a raíz de la multitud que lo agasajó y acompañó sobre la autopista Riccheri, demorando el avance del micro descapotable que los trasladó.
Una primera recepción fue la que impactó a los futbolistas argentinos que mostraron sus rostros con gestos de incredulidad mezclados con felicidad, seguramente imaginando también lo que sucederá en pocas horas, cuando vuelvan a subirse al mismo micro para recorrer, quien sabe en cuánto tiempo, los 30 kilómetros que separan al predio afista del Obelisco porteño.