Samsón será el nuevo gerente del Hospital de Metán, tras la renuncia de Balbuena
Debido a las quejas y denuncias contra la gestión de Balbuena al frente del Hospital de Metán, la ginecóloga renunció a la gerencia. El cargo será ocupado por el traumatólogo Pedro Samsón, concejal electo, quien será puesto en funciones en los próximos días.
"Por ahora no voy a hacer declaraciones al respecto. Lo único que le puedo decir es que voy a trabajar donde pueda servir a la comunidad de la mejor manera", dijo el profesional.
Extraoficialmente se supo que el traumatólogo se hará cargo de la gerencia del hospital metanense por un pedido del propio ministro de Salud Pública de la provincia, Federico Mangione, según informó El Tribuno.
Al parecer Samsón tiene previsto realizar un cambio casi completo del actual equipo gerencial del hospital del sur provincial. El profesional tiene 58 años, se recibió de médico en la Universidad Nacional de Tucumán y realizó su especialidad en traumatología y ortopedia, entre 1991 y 1996, en Barcelona, España.
Annavella Balbuena asumió en el cargo en enero de 2020. Había presentado su renuncia cuando se fue de ese ministerio Juan José Esteban, en un criterio que siguen todos los gerentes de hospitales. Finalmente autoridades sanitarias aceptaron la renuncia de Balbuena el martes pasado y será reemplazada en los próximos días por Samsón.
La doctora Balbuena es santiagueña, está radicada desde varios años en Metán. Durante la gestión que la médica todavía lleva adelante se logró el histórico funcionamiento de una terapia intensiva, la ampliación y distintas mejoras en el hospital.
Duros cuestionamientos
Balbuena comenzó a recibir duros cuestionamientos en abril del año pasado, cuando un grupo de hombres y mujeres, incluso algunos con niños, pasaron una noche completa en la puerta del sector de la guardia vieja del Hospital del Carmen, que da hacia la calle José Ignacio Sierra, para tratar de conseguir turno para un neurólogo.
Algunos se instalaron con reposeras y colchas a las 18 horas y los turnos comenzaron a entregarse a las 7 de la mañana del día siguiente. "Desde las seis de la tarde estoy acá con mi bebé de tres años que tiene autismo. Le pregunté a un personal del hospital si podía pasar adentro para que el chiquito no pase frío y nos dijeron que la fila tenía que ser afuera porque hay que respetar las medidas", dijo en ese momento una mujer que pasó la noche en ese lugar con su pequeño.
Esa situación volvió a repetirse en mayo, cuando personas humildes, la mayoría mujeres, volvieron a concentrarse en el mismo lugar e iban a pasar la noche para tratar de conseguir un número para el neurólogo infantil. Gracias a la intervención de autoridades de la localidad, los turnos fueron entregados esa misma tarde y se evitó que los vecinos pasaran la noche a la intemperie.