Femicidio en El Tipal: “Muchas veces sucede cuando la mujer toma un lugar de autonomía”
El femicidio de Merecedes Kvedaras se sumó al de otras siete mujeres que murieron en manos de un hombre sólo por el hecho de ser mujer y ser apreciada como una propiedad de su ascensión. InformateSalta dialogó con Ana Pérez Declercq, una de las directoras del Observatorio de Violencia contra las Mujeres, quien analizó cuál es la situación en Salta.
“La provincia tiene la posibilidad de tener un relevamiento a partir de la existencia del Observatorio. Vienen aumentando, desde el 2015 las denuncias pasaron de 11.000 a 26.000, esto quiere decir que hay mayor posibilidad de denunciar, hay mayor conciencia en contra de la violencia”, dijo.
Salta se encuentra entre las provincias con más muertes violentas de mujeres. A lo largo de los años, los femicidios fueron fluctuando, “hubo años en los que se llegó casi a 20 femicidios, otros hubo menos de 10, hay una tendencia de aumento de denuncias y muertes hacia la última parte del año, es un fenómeno que se debe estudiar con mayor profundidad”.
Pérez Declercq señaló que el femicidio “es un exponente de toda una situación que hay detrás que tiene que ver con una cultura, es importante no quedarse en el caso en sí sino que hay que plantear una cuestión más profunda que tiene que ver con una cultura de posesión, sobre todo de los hombres sobre las mujeres”.
Si analizamos los casos de femicidio en términos globales, de acuerdo a lo que manifestó Pérez Declercq, muchos se desencadenan cuando la persona tiene una nueva pareja o cuando termina una carrera, cuando accede a un puesto laboral, situaciones de autonomía de las mujeres que desatan en una situación de violencia.
Este año, en Salta, tenemos 8 caratulas de femicidio hasta el momento y entre 15 y 18 muertes de mujeres que están siendo investigadas. Hay algunos casos de suicidios que están siendo investigados para determinar si fueron inducidos o provocados. Este año vemos características diferentes porque varios de los casos no tuvieron que ver con vínculos cercanos de parejas o ex parejas, ocurrieron en la vía pública y no en el hogar.
“Como sociedad, hay que trabajar con los varones desde la primera infancia porque la violencia no se despierta de un día para el otro, es algo que se va construyendo de a poco. Ya desde la escuela primaria, donde los varones pueden usar pantalón y correr tranquilos en el patio, jugar al futbol y las mujeres no, hay una condición de autonomía que se le niega a la mujer”, analizó.