Nos encontramos transcurriendo la semana del Milagro en nuestra provincia en donde la fidelidad y el agradecimiento se ven y sienten en las calles salteñas mientras las familias y peregrinos se congregan para venerar a los santos patronos, el Señor y la Virgen del Milagro. 

En los rostros se pueden ver las emociones que invaden a cada uno que se acerca a la Catedral y de aquellos que se encuentran en camino hacia la misma. En este caso los que arribaron a la casa de los santos patronos fueron los peregrinos de General Güemes y Santa María, Catamarca. 

A caballo y con poncho desde General Güemes, llegaron los fieles “con mucha fe y mucho sacrificio”, desde hace 8 años hacen el viaje hasta sus santos patronos. “Veníamos a cumplir una promesa que hizo la familia”, decía emocionado el peregrino mientras agradecía por el trabajo, salud y vida, pidiendo a todos “que valoren, que lo amen y lo respeten” esta celebración religiosa. 

“Este año vine a agradecer, más a agradecer” decía el peregrino de Santa María de Catamarca, quien recordaba que desde el 2011 inició este camino de fe cuando en ese momento no era padre y ahora junto a su pequeño realiza el viaje de 7 días hasta el Señor y la Virgen.

En familia y con la voz quebrada de los sentimientos que le llenan el pecho, repetía que se sentía muy feliz, a la vez que agradecía a los salteños por su asistencia todos estos años “siempre el salteño nos brindó algo, nos dio una mano en todo, siempre nos espera”.