Hay un malestar que viene en crecimiento en el centro de la ciudad de Salta, más precisamente en los alrededores del llamado “Corredor de la Fe”, debido a los locales nocturnos y bares que funcionan por la zona que impiden el descanso, aturden con su ruido y no dejan reposar a los vecinos ante el bullicio que ocasionan.

¿Qué está pasando? Según lo publicado por el medio Nuevo Diario, son unas 20 familias que desde octubre del 2023 dejaron de tener paz por las noches, siendo los principales focos de ruido una peña y una posada, esta última de calle Deán Funes, habitué de fiestas electrónicas.

Los vecinos enfatizaron que ni la peña ni la posada tienen la habilitación pertinente para funcionar con espectáculo, como de por si los rubros de espectáculos no están permitidos para esa zona, al estar en un área con iglesias, establecimientos educativos y hogares.

"Empezamos a reclamar que bajaran la música que comenzaba a escucharse desde las 10 de la mañana hasta altas horas de la noche, no dejando descansar ni a la siesta y menos a la noche”, dijo uno de los residentes damnificados agregando que “la gente mayor que se quejó fue burlada”.

Otra vecina apuntó a que, si bien reclaman al 911 y que hasta hicieron una denuncia ante Control Comercial, hasta ahora solo consiguieron una “clausura sin faja” a la peña, pero se dejó habilitado al restaurante bajo compromiso de sus responsables de no seguir con la actividad.

“Si alguien nos considera ciudadanos de segunda que nos vamos a resignar a vivir en nuestros domicilios con música de fondo de una peña por el resto de nuestros días, se equivoca, vamos a recurrir a todos los medios legales a nuestro alcance para terminar con esta actividad ilegal que está funcionando con total impunidad", aseveraron los perjudicados.