Tardó 19 años en reconocer a su hija, ahora deberá indemnizarla
Una joven inició una demanda de filiación en la justicia contra su progenitor quien, en 2021, después de 19 años, la reconoció.
Nacida en 2002 producto de una relación fugaz, obtuvo el examen de ADN posterior a su demanda, dando como resultado una compatibilidad superior al 99,99%, por lo cual el sujeto reconoció su paternidad.
Ante esto se condenó al hombre a pagar un monto por el daño moral producto de los 19 años de demora, lo cual fue apelado por el acusado, ya que, según él, no se había probado su culpa, se sometió voluntariamente al ADN y recién después de 18 años se enteró que fue padre de una niña extramatrimonial.
Pero se pudo conocer que el hombre sabía del embarazo de la mujer y donde vivía incluso dijo que si la joven se vio privada del reconocimiento filial fue porque no existió un reclamo materno.
Pero tras fracasar los pedidos informales, debió la joven recurrir a la acción de filiación.
Los jueces Ivanna Chamale de Reina y Ricardo Casali Rey, recordaron que la filiación tiene su basamento en el derecho a la verdad y la identidad de los menores con relación a su origen: “El saber quién soy, que expresa el contenido esencial del derecho a la identidad, tiene alcances muchos más amplios que se derivan de la propia dignidad de la persona humana abarcando el derecho a construir la propia historia familiar (…) negación voluntaria a establecer filiación de un hijo constituye una conducta antijurídica”.
También establecieron que en virtud de los testimonios se presume que tuvo conocimiento del embarazo por lo que se incumplió el deber jurídico de reconocimiento oportuno del hijo.
Por el reconocimiento tardío, los perjuicios entre ellos moral, y la evidente actitud de querer someterse repentinamente a la prueba biológica en ámbito extrajudicial, requieren de un reclamo indemnizatorio.
Rechazado el recurso de apelación por la Sala Primera de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial, se condenó en primera instancia a pagarle por el daño moral a su hija y los costos del proceso.