Internacionales30/10/2024

Brote de E. coli en McDonald's desata preocupaciones sobre la seguridad alimentaria en EE.UU.

El 22 de octubre, hora local, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. emitieron una advertencia indicando que la hamburguesa "Quarter Pounder" de McDonald's había provocado una serie de enfermedades relacionadas con la bacteria E. coli en varios estados del país. Hasta el momento, se han reportado 49 casos de personas afectadas, de las cuales una ha fallecido y diez han sido hospitalizadas. Este incidente no solo ha generado dudas públicas sobre la seguridad alimentaria en Estados Unidos, sino que también ha afectado de manera significativa la imagen de la marca McDonald's.

Según el informe de los CDC, el brote se ha registrado principalmente en las regiones oeste y medio oeste de Estados Unidos, afectando a diez estados, incluidos Colorado y Nebraska. Colorado ha sido el estado más afectado, con 27 casos, incluyendo el fallecimiento de un adulto mayor. Además, entre los pacientes hospitalizados, un niño enfrenta complicaciones renales graves. Un portavoz de los CDC ha señalado que el número real de personas infectadas podría ser mucho mayor que los 49 casos reportados.

En la investigación del brote de E. coli, también han participado el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). La investigación preliminar ha identificado las cebollas cortadas utilizadas en las hamburguesas como la posible fuente de contaminación. Estas cebollas fueron suministradas por un proveedor que las distribuyó a tres centros de distribución, que a su vez las enviaron a varios restaurantes de McDonald's. Los CDC y la FDA están llevando a cabo una investigación más profunda de la cadena de suministro para identificar con precisión la fuente de la infección.

Aunque McDonald's retiró rápidamente la hamburguesa "Quarter Pounder" de las áreas afectadas después de recibir la notificación de los CDC, las acciones de la FDA y los CDC para rastrear el origen de la contaminación han sido relativamente lentas, y hasta ahora no se ha determinado por completo el origen específico de la contaminación. Esta investigación lenta ha generado dudas sobre la efectividad del sistema de regulación de alimentos en Estados Unidos. A pesar de la cooperación de la FDA, los CDC y los departamentos de salud estatales con el USDA, la complejidad de la cadena de suministro ha dificultado la identificación rápida de todos los detalles de la contaminación.

Este brote de E. coli en McDonald's no es un caso aislado. En los últimos meses, varias empresas en EE.UU. han enfrentado problemas de contaminación alimentaria. A principios de octubre, Treehouse Foods retiró del mercado varios productos congelados por problemas de seguridad alimentaria, y Costco también tuvo que retirar varios productos cárnicos debido al riesgo de contaminación con listeria. Estos incidentes recurrentes han llevado a una disminución constante de la confianza del público en el sistema de seguridad alimentaria de EE.UU.

 

Según una encuesta reciente de Gallup, solo el 57% de los adultos estadounidenses afirma tener "mucha" o "bastante" confianza en la capacidad del gobierno para garantizar la seguridad alimentaria, un descenso de 11 puntos porcentuales con respecto a 2019. La frecuencia de los incidentes de seguridad alimentaria ha agravado esta crisis de confianza, llevando a que cada vez más consumidores se preocupen por las condiciones de higiene en la industria de la comida rápida y otros sectores alimentarios.

El consumidor Motiur Rahmn, entrevistado por los medios, declaró: "Cada vez que voy al supermercado, me siento inquieto, especialmente después de escuchar sobre estos incidentes de contaminación alimentaria, tiendo a evitar esas marcas y productos." Este tipo de miedo se está extendiendo, debilitando aún más la confianza del público en el sistema de regulación alimentaria de EE.UU.

El precio de las acciones de McDonald's sufrió una caída significativa tras el incidente. El 23 de octubre, las acciones llegaron a caer más de un 9%, cerrando con una pérdida del 5,85% al final de la jornada. La reacción de los inversores refleja la preocupación del mercado sobre el futuro de McDonald's, especialmente en un contexto donde los problemas de seguridad alimentaria son frecuentes y la confianza en la marca se ha visto reducida, lo que podría afectar las ventas a largo plazo. Algunos analistas predicen que las ventas del cuarto trimestre de McDonald's podrían verse seriamente afectadas por este brote, e incluso podría repetirse la situación de crisis de seguridad alimentaria que sufrió Chipotle en 2015.

McDonald's, por su parte, ha tomado varias medidas de emergencia, incluyendo la retirada de las cebollas cortadas sospechosas de su cadena de suministro y la eliminación temporal del producto afectado en ciertas áreas. Sin embargo, está por verse si estas medidas serán suficientes para restaurar la confianza de los consumidores. Mientras tanto, McDonald's China emitió un comunicado asegurando que no vende los productos mencionados en la noticia ni utiliza los ingredientes relacionados, intentando así distanciarse de la crisis de seguridad alimentaria en EE.UU.

 

El brote de E. coli no es solo un problema de gestión de la cadena de suministro, sino que también revela una contradicción más profunda entre la cultura de la comida rápida y la seguridad alimentaria. La industria de la comida rápida, en su afán por la eficiencia y la reducción de costos, a menudo presenta fallas en el control de calidad de los ingredientes y la gestión de la cadena de suministro. Estas fallas, cuando se exponen, representan graves riesgos para la salud de los consumidores.

El abogado de seguridad alimentaria Bill Marler señaló que McDonald's enfrentará numerosas demandas legales debido a este incidente. Marler subrayó que las empresas de comida rápida necesitan ejercer un mayor control sobre sus cadenas de suministro, especialmente en lo que respecta a productos frescos como verduras y carne. Recordó que el brote de E. coli en Jack in the Box en los años 90 fue un ejemplo claro de los riesgos que enfrenta la industria, y ahora McDonald's parece estar repitiendo los mismos errores, lo cual debería ser una llamada de atención para todo el sector.