Policiales20/11/2024

Sereno fue secuestrado a punta de pistola por dos comerciantes en Tartagal, lo acusan de "entregador"

El terrible caso que tiene como acusados a comerciantes de Tartagal, padre e hijo, ocurrió días atrás. Un joven, que trabaja como sereno en una plazoleta de Tartagal, según denuncia su hermana, habría sido subido a punta de pistola a una camioneta por estos dos hombres que lo acusan de ser quien los entrega a delincuentes, que luego roban en su comercio.

La hermana del joven placero decidió hacer pública la denuncia de lo ocurrido a través de una entrevista con el periodista de la zona, Luis Mena. La mujer contó con lujo de detalles el modus operandi de los sujetos que decidieron hacer justicia por mano propia ante el supuesto dato de que el trabajador municipal era entregador. 

La joven recordó que el día del hecho fueron con su mamá a llevarle de comer y no estaba. "Trabaja como obrero municipal y cuida la Plazoleta Hipólito Yrigoyen entre las calles España y Araoz; fuimos como a las 12 de la noche con mi mamá a llevarle algo para que coma porque vive lejos y su esposa no tiene cómo ir todas las noches y no lo encontramos; nos pareció muy extraño que haya dejado su trabajo, por lo que dimos unas vueltas por todos los negocios pero no estaba en ningún lado por lo que decidimos salir a buscarlo, cuando volvimos a la media hora por la plazoleta vi que a mi hermano lo tenían rodeado dos policías y dos hombres de civil que son los dueños de una panadería que está a pocos metros de la plazoleta".

Continuó "Cuando me acerqué escuché que uno de los hombres en tono de burla le decía a mi hermano, ´ahora te haces el malo pero hace rato eras una mamita´. MI hermano tenía una cara de pánico que no sabía qué le habían hecho. Les pregunté qué pasaba y lo que me contestó uno de ellos es que mi hermano les señala a los delincuentes para que le roben a ellos, cuando en realidad mi hermano está en ese lugar desde las 10 de la noche hasta las 6 de la mañana trabajando de sereno". 

Amenaza de muerte 

La joven mujer dijo que su hermano le contó "que los dos hombres se le acercaron cuando él estaba en la plazoleta, lo apuntaron con un arma y lo obligaron a subir a la camioneta negra donde iban el padre y el hijo, dueños de la panadería. Cuando a mi hermano lo metieron en la camioneta, el hijo del comerciante le apretó el cuello a mi hermano con su brazo y le dijo que tenía que contarle con lujo de detalles el nombre y la descripción de todos a los que mi hermano les daba información sobre ellos.

Asegura que cuando lo bajaron lo amenazaron de matarlo o tomar represalias con su familia si contaba algo "El padre iba manejando y lo llevaron lejos del centro, le decían que si no hablaba ahí mismo lo iban a matar. También le mostraban en sus teléfonos imágenes de gente de Bolivia y que ahí lo iban a llevar y los iban a entregar a esos tipos si no confesaba lo que ellos decían saber respecto de que mi hermano era un entregador a los delincuentes. Antes de bajarlo de la camioneta le dijeron que no diga una palabra de lo que le hicieron porque ellos tienen muchos contactos, que saben dónde mi hermano vive, cuántos hijos tiene y que conocen a toda su familia".

En cuanto a la  causa, según supo El Tribuno la misma esta cargo de la Brigada de Investigaciones y desde la Unidad Regional N° 4 confirmaron que el Sistema de emergencias 911 tiene grabaciones del hecho, pero por el momento desde la Fiscalía interviniente no se conocieron medidas sobre el hecho.