En Salta nadie controla los ascensores, pese a que hay dos ordenanzas
Para miles de salteños es una rutina abrir la puerta del departamento u oficina, llamar al ascensor, subir y bajar. El elevador se transformó en una máquina infaltable en la mayoría de los edificios que cada vez ganan más altura en la capital salteña. La legislación establece la creación de un organismo verificador de operadores y un registro de elevadores.
Para miles de salteños es una rutina abrir la puerta del departamento u oficina, llamar al ascensor, subir y bajar. El elevador se transformó en una máquina infaltable en la mayoría de los edificios que cada vez ganan más altura en la capital salteña.
La muerte de la niña de 8 años aplastada por un ascensor, ocurrida el jueves pasado, volvió a poner sobre el tapete una serie de interrogantes ¿Quién verifica los trabajos que hacen las empresas de instalación y mantenimiento?, fue una de las inquietudes.
Mañana, autoridades de la Municipalidad se reunirán con el Consejo de Ingenieros para iniciar la reglamentación.
En la actualidad, varias empresas ofrecen sus servicios: colocan ascensores, cambian motores y piezas, y realizan tareas periódicas de mantenimiento. Sobre el tema, hay dos ordenanzas que ponen reglas claras para esta actividad y para las autoridades de contralor. Sin embargo, todo quedó en los papeles.
En 1998, se aprobó la ordenanza 8.428 que fija las condiciones de la instalación de las cajas. Mientras que en 2006, el Concejo Deliberante agregó más pautas al sancionar la norma 12.920.
De esa forma, se determinó la creación de un área específica encargada de realizar los controles para que se cumplan las legislaciones de instalación y verificación de ascensores en las construcciones de altura. Se aclaró que tal organismo quedará bajo el ala de la Municipalidad.
También, se ordenó la elaboración de un registro de las firmas que operan en la ciudad y la creación de una base de datos de los edificios que tienen ascensores.
Pasaron los años, y las personas que utilizan a diario los elevadores no vieron que las indicaciones se hayan aplicado. Así, hoy es una cuestión de suerte subirse al ascensor y llegar a destino sano y salvo.
Algunos avances
Al ser consultado sobre el tema, Emiliano Venier, secretario de Planificación y Desarrollo de la comuna, aseguró que ya se avanza en cuanto al registro de ascensores.
Precisó que en la actualidad hay dos empresas habilitadas: Viobal SRL Transporte Verticales y Carlos Zunino. Mientras que STV Ascensores aún debe completar los trámites.
“Se les envió notificaciones para que presenten el estado de los ascensores de los departamentos donde realizan mantenimientos”.
Luego puntualizó que “a partir del trabajo de sistematización, se dispone de toda la información de las obras que se ejecutaron desde 2001 hasta el presente. Ahora se lleva adelante la depuración para determinar la cantidad de propiedades y los ascensores”, comentó el funcionario.
Reglamentación
En diálogo con El Tribuno, Emiliano Venier reconoció que en la Secretaría de Planificación y Desarrollo no se concretó la formación del organismo encargado de supervisar las instalaciones de transportes verticales. Pero adelantó que mañana habrá un encuentro con autoridades del Consejo Profesional de Agrimensores, Ingenieros y Profesiones Afines (COPAIPA) para encarar la esperada reglamentación.
“El órgano tendría que estar conformado por asesores de Desarrollo y Planificación municipal, representantes del COPAIPA, delegados de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Salta y de la Facultad de Ingeniería en Informática de la Universidad Católica, y empresarios del sector”, detalló Venier.
Mantenimiento e instalación
Aníbal Acuña, gerente de Viobal, dijo que para operar en el mercado de ascensores se les exigió “una habilitación municipal y una matrícula de los responsables que se presenta en el COPAIPA”.
Al realizar una instalación, entregan una carpeta con los detalles técnicos a la Municipalidad.
Luego se hacen mantenimientos periódicos. “Es óptimo que se haga una vez por mes. En algunos edificios se toma conciencia pero en otros no”. Relató que “mayormente no se cambia la caja, cuesta mucho un elevador. En cambio, se hacen mejoras en forma progresiva”.
Estadísticas
Acuña dio a conocer datos estadísticos de su compañía. El 40% de los problemas se generan por cuestiones eléctricas. El corte de energía es la causa más frecuente.
La incorrecta utilización del equipo también tiene un alto índice. El 40% de las fallas son humanas. En menor medida, 20%, se registran problemas técnicos.
La última tragedia
El jueves pasado, una niña de 8 años intentó ingresar a un elevador del edifico ubicado en la avenida Bélgica 1.355 de la capital salteña. En ese instante, obreros de la empresa “Servicios de Transportes Verticales” realizaban ajustes en otro elevador. La pequeña puso un pie en la caja que, de repente, se disparó hacia arriba. Su cuerpo se trancó en el hueco que queda entre el hierro de la cabina y la pared del nicho.
Fuente: Diario El Tribuno