En Salta, 70 personas condenadas por violencia de género serán monitoreadas con pulseras electrónicas
La Nación entregó hoy al Ministerio de Seguridad de la Provincia de Salta 40 nuevos dispositivos electrónicos que se suman a los 30 que ya funcionaban en el territorio local.
Gobierno15/06/2018Esta mañana, el ministro de Seguridad de la Provincia de Salta, Carlos Cayetano Oliver, junto al Procurador General de la Provincia, Pablo López Viñals, recibió de manos de la subsecretaria de Acceso a la Justicia de la Nación, María Fernanda Rodríguez, 40 nuevas pulseras electrónicas que serán destinadas al monitoreo de personas que fueron condenadas por violencia de género.
Cabe recordar que el Gobierno de la Provincia de Salta y el Ministerio Público Fiscal, desde marzo del año pasado, implementan el sistema UNMOVI (Unidad de Monitoreo para Víctimas de Violencia) que consiste básicamente en el monitoreo, a través de pulseras electrónicas, de personas que fueron condenadas por violencia de género.
Salta junto a otras cuatro provincias fue elegida por el Ministerio de Justicia de la Nación para poner en funcionamiento este moderno sistema que permite el control de personas violentas a través de dispositivos tecnológicos.
Hasta la fecha, son 30 pulseras electrónicas las que están activas en la provincia de Salta y que son monitoreadas desde el Centro de Coordinación Operativa del Ministerio de Seguridad, las 24 horas, los 365 días del año.
Los fiscales de violencia de género del distrito judicial Centro son quienes determinan cuáles son los casos que ameritan el uso de las pulseras electrónicas. Los imputados son controlados mediante los dispositivos a fin de verificar distintas medidas cautelares dictadas en beneficio de las víctimas, entre ellas la prohibición de acercamiento.
Desde que el protocolo se pone en marcha, los operadores del Sistema de Emergencias 9-1-1 pueden monitorear a los usuarios en tiempo real, lo que permite iniciar medidas de protección instantáneas en favor de las víctimas, por ejemplo, cuando se advierte que la persona que tiene la pulsera violó la distancia legal permitida respecto a la víctima.