Estafa al Pami: Anularon la acusación de un médico y tres bioquímicos salteños

 A poco más de un año de ser procesados por el juez federal de Jujuy, Wenceslao Cardozo, la Sala I de la Cámara Federal de Apelaciones de Salta, con duras críticas al magistrado jujeño, anuló el procesamiento de los profesionales y recomendó que el caso quede en manos del fiscal federal 1, Ricardo Toranzos.

El fallo favoreció a medias al médico Augusto Saúl Sasso y los bioquímicos Osvaldo Miranda, Enrique Guillermo Bardi y Silvina Mariela Díaz, cuyas defensas habían apelado el procesamiento resuelto por el juez Cardozo en marzo del año pasado, casi un año después de las primeras denuncias en torno al caso.

Los camaristas, Luis Renato Rabbi Baldi, Mariana Inés Catalano y Ernesto Sola, resolvieron el 29 de abril pasado la nulidad de los procesamientos a instancias de las apelaciones planteadas por los cuatro profesionales, quienes se vieron beneficiados a medias tintas, pues los camaristas recomendaron que la investigación quede en manos de la fiscalía federal 1, a cargo del fiscal, Ricardo Toranzos.

Como se recordara, el caso saltó a luz en marzo del año 2017 a partir de la denuncia de Josefina Medrano de la Serna, Coordinadora Ejecutiva de la Unidad de Gestión 12 de Salta del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados.

La denuncia tuvo como base la auditoría de la Asociación de Bioquímicos de Salta, del 25 de enero de 2017. Dicho informe reveló una cadena de prácticas irregulares detectadas por ese organismo, ya sea por presuntas falsificaciones o por ser hechas a personas fallecidas o inexistentes.

A partir del reporte de auditoría y otros documentos contables, el PAMI calculó el fraude en una suma de 250 mil pesos mensuales, maniobras que se habría extendido por un año, con lo cual la suma ascendería a unos 3 millones de pesos.

La investigación del caso la tomó el fiscal Toranzos, quien elevó al juzgado federal 2, a cargo de Miguel Medina, la promoción penal respectiva y sugirió una serie de diligencias procesales en busca de reunir la suficiente carga probatoria en contra de los profesionales implicados.

Frente al caso, el juez Medina se excusó en razón de que uno de los profesionales acusados, el médico Miranda, atendía a su padre. En vista de ello, el caso fue a parar a manos de Cardozo, quien se puso al frente de la causa y por un año dirigió el proceso penal.

En marzo del año pasado, Cardozo resolvió el procesamiento de Sasso, Miranda, Bardi y Díaz, a quienes les adjudicó los delitos de defraudación a la administración pública, como así también dispuso un embargo para cada uno de los profesionales por la suma de 100 mil pesos.

En su fallo, Cardozo afirmó que “existían pruebas” suficientes para dictar los procesamientos de los acusados por el delito de defraudación contra el PAMI “por la sistemática prescripción de prácticas bioquímicas no comunes y repetidas [sin explicar por qué les asigna esa calidad] de cuyo producido participaba con los bioquímicos Bardi y Díaz”.