El homenaje de Dalma y Gianinna Maradona a Diego: “si alguien se lo quiere hacer, le pasamos el original”

Es sabido que Diego Maradona -entre las numerosas particularidades que lo distinguían- usaba dos relojes a la vez. Alguna vez contó que el que portaba en la muñeca izquierda indicaba la hora del lugar del mundo en el cual se encontraba, mientras el que llevaba en la derecha señalaba en cuál huso horario se ubicaban sus hijas mayores. A escasos centímetros sus antebrazos estaban marcados en tinta negra por sus nombres completos, inscriptos en la piel con sendas letras góticas: Dalma Nerea y Giannina Dinorah.

Para quien fuera el mejor futbolista de la historia, las dos parecían ser su debilidad. Si hasta realizó en infinidad de veces un juramento que terminó alojándose en el imaginario colectivo: de un tiempo a esta parte prometer “por Dalma y Gianinna” es empeñar la palabra; ya no hay vuelta atrás posible.

Este 25 de diciembre no fue una Navidad cualquiera en la Argentina. Justo ese día -a contramano del espíritu festivo que lo caracteriza- se cumplió el primer mes de la muerte de Maradona, que todavía entristece a todo un país, a una multitud que transita el duelo por la partida del mayor ídolo popular que habitó en estas tierras. Y por supuesto, Dalma y Gianinna no podrían estar ajenas al dolor por la desaparición de su padre.

Es por eso que en estas horas, como parte de las numerosas muestras de afecto que ya le dedicaron en las redes sociales, la actriz -habida cuenta de que su hermana cerró sus cuentas de forma temporal- compartió en Instagram el tattoo que ambas se hicieron. Es cierto que no tiene la contundencia de los tatuajes que les dedicara Diego, aunque solo en lo que se refiere al tamaño: el simbolismo de ese diseño minimalista y reducido en sus dimensiones -no debe superar el centímetro- es abrumador. Porque Dalma y Gianinna ahora llevan en sus tobillos el (10) -así, entre paréntesis- con el que Maradona rubricaba la firma de sus autógrafos.