Andrés Felipe Román, jugador de Millonarios, recibió el jueves pasado una de las noticias más duras de su vida: había viajado a Argentina para firmar con Boca Juniors, pero el club argentino no lo contrató, al no superar los exámenes médicos. Según el cuerpo médico xeneize, el defensor sufría una miocardiopatía hipertrófica y algunos dudaron hasta de su futuro en el fútbol.
El lunes pasado, Millonarios sometió al defensor a nuevas pruebas, en la clínica Shaio para determinar el alcance de su problema y, entre las pruebas que se le realizaron al jugador están un electrocardiograma, ecocardiograma y cardioresonancia.
Los resultados de las mismas fueron analizados por una junta médica del club y no se encontró la anomalía que sí surgió en Argentina, por lo que la contradicción quedó a la vista, aunque su corazón sí creció en tamaño en los últimos tiempos, por lo que se lo llama "de atleta".
Ante esto, Román será parado por tres meses y en Europa le realizarán estudios genéticos para determinar si puede seguir o no con su carrera profesional. El club cafetero, para oficializar lo sucedido, emitió un comunicado donde explica y da a conocer detalles de los exámenes realizados.