Para El Tribuno, hubo una fiesta de sexo y alcohol previa al crimen de Bº Arturo Illia

El homicidio de Lucas Aricuri, ocurrido el lunes a la madrugada, comenzó con una fiesta en un boliche de la calle Balcarce que luego se prolongó con una fiesta de sexo y alcohol entre seis varones, en un departamento del Barrio Arturo Illia, en la zona sur de la capital.

Hay dos hermanos, de apellido Muñoz, detenidos por este caso. Uno de ellos, que es mayor de edad, está alojado en la Alcaidía Judicial, mientras que el menor de edad fue enviado al Centro de Atención de Menores en Conflicto con la Ley.

Según el fiscal Pablo Paz, a cargo de la investigación, el mayor de los hermanos, Nahuel Muñoz, -sindicado como la persona que le asestó una puñalada en el pecho a la víctima- se habría negado a declarar ayer. Sobre él pesa la acusación de homicidio simple.Su hermano, cuyos datos quedaron en reserva por tratarse de un menor, está acusado de encubrimiento.

Se sabe que en la fiesta también estuvieron Adrián Amado (34) y Mario Coronel (39), amigos de Aricuri. Existe un trascendido según el cual en el departamento también estuvo una travesti de nombre Camila, que tendría 32 años. Todos ellos estarían libres.

Versiones sobre esa noche
Qué sucedió esa noche es lo que la Fiscalía Penal y la Justicia buscan reconstruir con la versión de quienes estuvieron en el departamento y de personas que fueron testigos directos e indirectos del hecho, como los vecinos.

Hasta ahora lo que se sabe es que en el departamento hubo una feroz pelea entre cinco o seis hombres. Aricuri, quien cuidaba ese departamento que es de un amigo, recibió una puñalada en el pecho que terminó con su vida.

Uno de los vecinos que escuchó los gritos y golpes pidió ayuda en la comisaría 15 del barrio San Remo. Pocos minutos después, la Policía detuvo a los dos hermanos Muñoz y en el transcurso de la mañana del lunes, mientras revisaba los alrededores del departamento, encontraron un cuchillo con manchas de sangre que habría sido utilizado por el homicida.

"Nosotros no tenemos novedades sobre lo que investigó el fiscal ni las declaraciones de cada persona; recién mañana vamos a conocer detalles cuando nuestro abogado tome directa intervención", afirmó una hermana del joven asesinado.

Daniela Díaz Bavio, agente preventora en materia de drogas, aseguró que durante un tiempo ella tuvo a los hermanos Muñoz bajo su contención porque son chicos con problemas de adicción.

"Yo los conozco como si fueran mis hijos, los considero mis hijos del corazón", aseguró.

Según la reconstrucción que ella hizo en base a información que recibió de familiares y amigos de los dos hermanos, la fiesta que terminó con el homicidio de Aricuri -de 34 años- comenzó en un boliche de la Balcarce.

Allí estaban la víctima con otros tres amigos, todos hombres de entre 30 y 39 años; ellos les ofrecieron dinero a los dos hermanos a cambio de ir a una fiesta privada en el barrio Arturo Illia, contó Díaz Bavio.

En determinado momento, Nahuel Muñoz estaba en una habitación con Aricuri y, de repente, "escucharon gritos desgarradores del hermano menor. Nahuel salió corriendo a ver qué sucedía y comenzó una feroz pelea que terminó con la vida de Lucas", añadió.

En medio de los golpes, "los tres amigos de Lucas se fueron del departamento y ellos dicen que fueron los que llamaron al 911".

Indagatoria
Para hoy está previsto que Nahuel Muñoz sea indagado por la Fiscalía Penal N´2, a cargo de Pablo Paz. El detenido fue citado a las 9. Su hermano podría quedar libre entre hoy y mañana por su condición de menor de edad.

"Dos chicos conocidos en el barrio"

Los hermanos Muñoz, detenidos por el crimen de Lucas Aricuri, son conocidos en el barrio Santa Ana por su adicción a las drogas y por haber estado involucrados en hechos delictivos.

"En el barrio Santa Ana (donde viven los hermanos) los conocen todos porque vienen cometiendo robos, amenazaron de muerte a otros vecinos. Ellos tienen un raid delictivo", aseguró una hermana de Aricuri.

Una fuente vinculada a la investigación del caso reveló que ambos jóvenes "están identificados en el barrio, pero hasta ahora los teníamos vinculados con las drogas y robos para conseguir dinero para drogarse".

"Yo sé que ellos tienen problemas de drogas y que han cometido otros hechos. Hace unos meses uno robó un almacén que estaba cerrado, se llevó mercadería porque tiene hermanitos; pero también sé que vienen de una familia completamente disfuncional", aseguró Daniela Díaz Bavio, quien dijo que durante un tiempo brindó contención a los jóvenes.

Una vecina del barrio Santa Ana, que prefirió no ser nombrada, dijo a El Tribuno que "los hermanos son conocidos porque andan en la droga, se juntan en la noche con otros changos que andan en lo mismo y hay vecinos que les tienen temor".

Fuente: Diario El Tribuno