Sobran argumentos para reconocer que los avances tecnológicos nos han cambiado la vida y siguen haciéndolo. Desde hace ya algunos años, y actualmente con mucha más fuerza, es imposible pensar la vida sin internet: es necesario tener “presencia virtual” para “existir” en el ciberespacio.
A su vez, la velocidad de estos cambios y avances tecnológicos permiten que cualquier persona con una computadora, celular e internet pueda generar una página web propia o para su empresa. Para ello hay un sinfín de plataformas, y servidores como Wix, Weebly, Yola, Wordpress, entre tantos otros, que te permiten explorar el mundo del desarrollo web para que puedas sacarle provecho.
Las ventajas son innumerables y existe una gran variedad de soportes que se ajustan a los distintos objetivos. Ya sea a nivel personal, a través de la creación de usuarios y blogs; o hasta incluso para empresas y marcas de toda magnitud que no podrían existir ni relacionarse de la forma que lo hacen sin internet.
Por ello, el punto de partida para cualquier persona o marca que esté buscando generar su propia web es fijar un objetivo que responda a la pregunta fundamental: ¿qué busco con esta página?
Aunque parezca poco, esa pregunta inicial ya resuelve gran parte del trabajo, ya que en base a su respuesta uno podrá elegir si desea crear una web informativa, un blog personal, una landing page, una tienda online, entre otras opciones.
¿Busco vender? ¿Quiero potenciar mi imagen? ¿Espero tener contacto directo con los que visitan la web? ¿Cómo me voy a presentar en la misma?, son algunas de las preguntas guía que irán dándole forma a nuestra idea y a nuestra intención.
Lo siguiente será pensar y definir un dominio, que es el nombre a través del cual los internautas acceden a tu sitio web y que debe ser único.
A partir de esto ya es momento de buscar un host o alguna plataforma web que genere y active el sitio. Algunas de ellas son aranceladas, aunque existen opciones gratuitas. En ellas podrás encontrar distintas herramientas para crear y diseñar tu presencia online.
Un dato importante es saber que no es necesario ser programador para generar un sitio web. Si bien hay términos o palabras que quizás no conozcas, es cuestión de familiarizarte con ellas.
Volviendo al diseño web, es fundamental aplicar criterios para que la página web sea amigable con los visitantes que lleguen. Si bien a veces “menos es más”, hay estructuras que pueden ser funcionales al objetivo de la persona que crea la web. Por ejemplo, generar secciones de “Quiénes somos”, “Preguntas frecuentes”, “Contacto” o páginas de productos, permiten organizar toda la información en distintas pestañas.
Darle un toque de identidad también en es un aspecto a tener en cuenta que dependerá de las herramientas que tengas a disposición según tu servidor. Los elementos visuales, las tipografías y colores serán fundamentales para crear una página que además de funcional sea estética.
Finalmente, se debe tener en cuenta que tener una página web requiere trabajo de mantenimiento, generar contenido y actualizarlo.
¡Manos a la obra!
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