Sergio Chorolque Sala, hijo de la líder de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, falleció hoy en Jujuy por causas que aún se desconocen. Así lo confirmaron desde el entorno de la dirigente detenida desde 2016 -actualmente cumple prisión domiciliaria- y condenada a 13 años de prisión por asociación ilícita y defraudación al Estado en la causa conocida como Pibes Villeros, un fallo que fue ratificado por la Corte Suprema, consignó La Nación.
El joven se definía como “militante kirchnerista y de la Tupac Amaru” en sus redes sociales, tenía 37 años y trabajaba en la Contaduría de la Provincia de Jujuy desde 2007, según registros públicos. En 2018 trascendió que se desempeñaba como asesor en el Concejo Deliberante de la capital provincial. Milagro Sala tiene otra hija, Claudia Elizabeth Chorolque Sala.
En 2017, la justicia jujeña lo imputó en una causa por lavado de dinero contra su madre, en la que se habían secuestrado 12 vehículos. En ese expediente se determinó que Chorolque había comprado siete autos entre 2011 y 2015, todos de contado.
Se trató de dos Fiat Cinquecento, tres camionetas Toyota Hilux, un Fiat Idea y un Fiat Palio, según informó en aquel momento el fiscal Aldo Lozano, que imputó a Chorolque por “encubrimiento agravado por aseguramiento y provecho de bienes de origen ilícito”.
El fiscal entendió que era imposible que el joven pudiera comprar esos bienes con sus ingresos declarados. Chorolque se defendió y, al reconocer que era dueño de un Fiat Cinquecento, dijo que lo había comprado con los “ahorros de sus trabajos en dos radios”.