Uno de los juveniles de Salta Basket, Enzo Rodríguez, fue cedido a préstamo al equipo Club Atlético Sastre, de Santa Fe. El traspaso se hizo en el marco del programa de crecimiento que llevan a cabo Los Infernales con los chicos que comienzan a entrenar con el equipo, de esa forma el juvenil tendrá la chance de vivir otra experiencia y seguir formándose como jugador y persona.
Oriundo del humilde barrio de Belén, en Villa Saavedra, Tartagal, ciudad ubicada el norte de la provincia, el alero de 1,90 metros de altura no tuvo la oportunidad de debutar en La Liga Argentina, segunda división del básquet en el país, sin embargo es parte de un proceso enriquecedor en cuanto al aprendizaje y el disfrute por el deporte.
“Estoy en Santa Fe, desde los primeros días de febrero, formo parte del equipo del pueblo de Sastre que va a jugar la liga local, del oeste de la provincia, y más adelante el Pre-Federal. Muy contento, acoplándome al grupo y a la pretemporada”, sostuvo Enzo Rodríguez, el juvenil que comenzó a botar una pelota de básquet en el Club Círculo Argentino de Tartagal, institución a la que agradece por la contención y ser el club de sus inicios.
Acerca de la experiencia que vivió con Los Infernales, el juvenil contó: “La experiencia que te deja ser parte de un equipo profesional como Salta Basket, en un nivel tan alto y exigente como La Liga Argentina, es impresionante. Te ayuda a mejorar mucho físicamente y tácticamente, si bien no logré tener minutos oficiales a la hora de entrenar con personas más grandes y juveniles de muy buen nivel te ayuda a mejorar día a día”.
“Por otro lado me ayudó a ser comprometido conmigo mismo, en el sentido de mejorar mi alimentación, levantarme temprano para entrenar, hacer horas extras en la cancha, mejorar el físico en el gimnasio y sobre todo entrenar fuerte, tener disciplina”, contó el alero norteño respecto al proceso que pudo disfrutar junto a Los Infernales.
Con nuevas ilusiones en el club santafesino, Enzo no es de guardarse nada y exterioriza sus sentimientos: “Las emociones siempre están, sobre todo las expectativas que son siempre altas. En lo individual quiero ayudar al equipo a sumar desde lo que aprendí y sigo aprendiendo, en los minutos que me toque estar en cancha aprovechar y ayudar al grupo. Y como siempre buscar mejorar, aprender de los nuevos desafíos, son competencias nuevas. Espero poder ayudar al equipo”.
En medio de tantas ilusiones, el alero infernal por supuesto que sigue soñando con regresar a Salta Basket y poder cumplir su sueño. “Volver al club con nuevas experiencias y sobre todo más rodaje que me hace falta sería hermoso. Este tiempo que voy a pasar acá en Santa Fe me ayudará a sumar experiencia y ese rodaje que necesito, para poder volver y buscar tener minutos y más protagonismo”.
Por último, el jugador no se olvidó de agradecer a quienes lo ayudaron y lo siguen haciendo en su proceso como jugador de básquet y también personal. “Quiero a Salta Basket por inculcarme buenos valores, sobre todo un estilo de vida profesional en el deporte. Estoy muy agradecido con los directivos, con el cuerpo técnico y sobre todo con los chicos, los jugadores que siempre me desearon lo mejor y apoyaron en todo. ¡Muchas gracias!”.
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