



El primer día de clases siempre está cargado de emociones, y para Luz Mía López no fue la excepción. Con una gran sonrisa y algo de nervios, la niña de 10 años comenzó el quinto grado en la Escuela Provincia de Salta N°4048, enfrentando un nuevo desafío en su camino educativo.
Desde que inició el jardín de infantes, Mía y su familia han superado numerosas barreras. Con el diagnóstico de Síndrome de Down, su escolaridad fue marcada por la perseverancia y el esfuerzo conjunto de sus seres queridos y docentes.
"Como familia, sin importar los vientos y mareas, siempre remamos hacia adelante para que logre sus objetivos y pueda completar un ciclo más junto a sus compañeros"
"Hoy Luz Mía comienza un nuevo desafío: inicia quinto grado con todos los obstáculos que esto implica, pero con la certeza de que estaremos otro año más a su lado. Como familia, sin importar los vientos y mareas, siempre remamos hacia adelante para que logre sus objetivos y pueda completar un ciclo más junto a sus compañeros", expresó su madre en diálogo con ConCriterioSalta.
Además, destacó la importancia del apoyo docente y el rol fundamental de Mirna, su seño inclusora, en este proceso.
Con determinación y entusiasmo, Mía inicia un nuevo año escolar, demostrando que, con acompañamiento y compromiso, la inclusión es posible.









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