


Un acto escolar y la despedida a una directora terminó en escándalo judicial, ¿cómo fue?
Justicia04/04/2025
Un acto escolar de despedida a una directora escolar jubilada desencadenó un escándalo que culminó en una causa judicial por calumnias e injurias, entre acusaciones, "dimes y diretes", concluyendo con un dictamen por parte de la Justicia.
¿Qué pasó? Según informó prensa del Poder Judicial, todo comentó tras la conmemoración del Paso a la Inmortalidad del Gral. San Martín, cuando una docente expresó que la exdirectora se iba "por la puerta grande". De manera imprevista, se escuchó a otra maestra quien respondió con la frase: "se va por la puerta chica, sacada a la fuerza por personal policial y llevada al Anses".
La situación escaló rápidamente, llevando a la exdirectora a presentar una querella por calumnias e injurias. En primera instancia, la docente acusada fue condenada a pagar una multa de $20.000 por el delito de injurias, aunque absuelta de calumnias por falta de pruebas concluyentes.
La causa llegó a la Sala IV del Tribunal de Impugnación, donde los jueces Federico Armiñana Dohorman y Ezequiel Molinatti analizaron el caso. El eje del debate fue la existencia del delito de calumnias, considerando que la exdirectora era funcionaria pública. Los jueces señalaron la "anomalía" de absolver y condenar simultáneamente por un mismo hecho, argumentando que el objeto del proceso es indivisible.
Los jueces también consideraron que la frase "se va por la puerta chica" no constituía necesariamente un atentado al honor, ya que la injuria debe implicar la atribución de cualidades peyorativas. Los testimonios recogidos durante el proceso describieron un ambiente de tensión y molestia, y se mencionó que los dichos fueron proferidos "en un momento de ofuscación".
Se destacó que los funcionarios públicos están sujetos al escrutinio ciudadano, y que la libertad de expresión debe prevalecer sobre el honor personal en asuntos de interés general. No obstante, se aclaró que la libertad de expresión no es un derecho absoluto.
Finalmente, los jueces hicieron lugar al recurso de casación presentado por la docente acusada, revocando la condena de primera instancia y absolviéndola del delito de injurias. Argumentaron que los dichos no se referían a un asunto de interés público, sino a una apreciación personal en un momento de ofuscación, y que la exdirectora ya no era funcionaria pública al momento de los hechos.







