“No se lo sacrificó, el perro se ahorcó”

Sergio David Ferri, médico veterinario y director General de Bienestar Animal, en diálogo con InformateSalta, echó por tierra las versiones que indicaban que un perro había sido sacrificado en el Refugio Municipal como forma de castigo por morder a un empleado.

En ese sentido, explicó que el can fue atado con una caña - caño metálico con una soga dentro que hace una especie de collar de ahorque -, luego de atacar a dos operarios que limpiaban el canil. “Se ahorcó cuando lo dejaron atado muy justo en la reja del canil, fue un accidente”, dijo.

Ferri detalló que, según le confió el personal, el perro empezó a girar y se fue enroscando la piola, que a su vez se fue ciñendo, y le ocasionó la muerte. No obstante, aclaró que de igual manera se lleva adelante una investigación para saber con exactitud lo que ocurrió con el animal.

El médico veterinario contó que se trataba de un perro NN, o sea sin propietario, que estaba en la vía pública, y tras morder a dos o tres personas, fue trasladado por la policía a control antirrábico. “Era un can mordedor, agresivo, si bien se extreman las medidas de seguridad cada vez que se ingresa a los caniles de los mordedores para limpieza y todo eso, el animal se zafó de su medio y atacó a los operarios”, señaló.

También descartó que el refugio se encuentre en malas condiciones, y que el personal moleste a los animales. “Para mi no tienen asidero bajo ningún punto de vista, son personas que trabajan hace muchos años con los animales, y la verdad que nunca tuve ningún tipo de problemas”, afirmó.

Por último, sostuvo que la versión, surgida por parte de un proteccionista, quizás apunte a presionar al ejido municipal para que se destinen más recursos humanos para la atención de los animales. “Si bien estamos trabajando bien, el recurso humano es poco”, finalizó.