En realidad la fiesta clandestina habría sido una estafa
Lo que se dio a conocer como una fiesta clandestina, y que motivó su clausura por parte de la Subsecretaría de Control Comercial de la Municipalidad habría sido una estafa a una promo de estudiantes que juntaba dinero para su viaje.
La noticia generó indignación entre los jóvenes organizadores, pues no estaba en sus intenciones engañar a nadie, sino pasar un buen momento y de paso recaudar dinero para su viaje de egresados.
La fiesta se desarrolló el sábado por la noche en un salón ubicado camino a San Agustín, conocido como "El rey del sábalo", para lo cual contactaron a los propietarios, y estos les habrían manifestado contar con todos los permisos y habilitaciones necesarios para la realización de este tipo de eventos. Incluso sabían que se iba a cobrar entrada.
No obstante, la Subsecretaría de Control Comercial, junto a la Policía de la Provincia irrumpió y dieron por finalizada la celebración, detectando en el operativo a menores de edad y bebidas alcohólicas. Por la fiesta se cobraba entrada y se realizaba en una carpa estructural armada, informaron desde la Municipalidad.
Es claro que la presencia de menores estaba dada porque se trataba de estudiantes secundarios que juntaban dinero para su viaje. No obstante, algunos de los organizadores aclararon a InformateSalta que no se vendían bebidas alcohólicas, sino que se trataba de bebida que estaba en el lugar (o sea era de los propietarios del salón), pero no se expendía a los presentes.
Lamentablemente, estos chicos de un colegio secundario capitalino fueron estafados en su buena fe, y tampoco tuvieron el asesoramiento correcto, ya que no habrían sido advertidos por los dueños del lugar de las irregularidades que cometían.