Sigue el problema de pesajes engañosos en carros de frutas
Un proyecto de ordenanza plantea la necesidad de que las balanzas de todos los comercios sean homologadas por el INTI. Dicen que el problema de estafas en venta por peso se da sólo en carros fruteros.
Un nuevo proyecto de ordenanza relacionado a las balanzas de uso comercial, trajo nuevamente la temática al ámbito de la ciudad donde ya se han implementado medidas al respecto pero con escaso éxito. En el año 2011 el ejecutivo municipal entregó 50 balanzas digitales a los vendedores de fruta que trabajan en el centro de la ciudad.
Los aparatos estaban destinados a terminar con las ofertas engañosas de las cuales vecinos se han quejado en reiteradas oportunidades. En su momento fueron entregadas en comodato, con facilidades de pago que van desde $10 por día, hasta entregas semanales y mensuales.
Las balanzas electrónicas con base fija estaban homologadas por el INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial). La iniciativa no surtió el efecto deseado ya que los vendedores las utilizaron unos meses y luego volvieron a su normal pesaje a través el cual el cliente no puede ver cuánto es lo que está comprando.
Para comercios también
El proyecto que el concejal Fernando Echazú presentó en el Concejo Deliberante esta semana solicita que “Ante las reiteradas quejas que recibimos de los vecinos, nos vemos en la necesidad de establecer nuevos parámetros para la habilitación de aquellos comercios que hagan usos de éstos instrumentos de medición o peso, para evitar así abusos y la comisión de delitos por parte de algunos sectores que pretenden lucrar, engañando a la consumidores” señaló Echazú.
De acuerdo a lo manifestado por Echazú “la municipalidad deberá verificar antes de otorgar una habilitación a los establecimientos de explotación comercial, industrial, agropecuaria, minero o de cualquier actividad que utilicen balanzas, que las mismas cuenten con la aprobación del Inti, organismo técnico especializado en pesos y medidas, que homologa y aprueba esos instrumentos”.
Según reza la iniciativa la Subsecretaría de Control Comercial la encargada de controlar periódicamente los locales comerciales corroborando que el precinto colocado en las balanzas no haya sido adulterado, que funcionen correctamente, entre otros temas.
El subsecretario de Control Comercial, Marcelo Scarponeti en diálogo con la Fm Aire Uno 94.5, reflexionó que la irregularidad en el peso se da en la venta ilegal y no en los comercios registrados. “Valoro la iniciativa del concejal porque se preocupa por algo que afecta a los vecinos, pero el problema no está en los comercios habilitados sino en los carros fruteros. Hemos tenido incluso cursos de capacitación intensiva sobre la ley de metrología con el INTI, y nos contactamos con la secretaria de defensa del consumidor, pero la complicación surge porque es muy difícil regular una actividad tan informal como este tipo de carros fruteros.”
Señaló el funcionario al tiempo que agregó que no hubo problemas ni denuncias en comercios formales por prácticas engañosas con balanzas. Con argumentos tales como la falta de energía eléctrica, o no disponer del dinero para adquirir una balanza homologada, los fruteros se excusan ante los inspectores y evitan hasta de manera violenta muchas veces que no se les permita vender más en determinados lugares.
“Son muy difíciles los controles porque hay insulto y golpes a veces a los inspectores y entonces necesitamos que nos acompañe la policía. Por otro lado hay una cuestión cultural que ya excede lo que un organismo oficial pueda hacer porque si la conducta del ciudadano sigue siendo la de comprar masivamente en puestos ilegales y luego piden que los erradiquemos se vuelve una tarea más complicada.”A su vez el funcionario recomendó que no es conveniente comprar en puestos fruteros productos que se vendan por peso en lugar de por unidad.
Fuente: Diario Punto Uno