Anticipan un final ajustado, pero cantado en el tratamiento del proyecto sobre tarifas
Si bien en las últimas horas el Gobierno consiguió sumar votos contra el proyecto sobre tarifas, solo conseguiría con ello maquillar el resultado final, que sería favorable a lo aprobado en la Cámara baja. Cómo sería el resultado.
Todo comenzó el 16 de abril pasado, cuando Elisa Carrió presentó un pedido de informe a la Jefatura de Gabinete sobre los aumentos de tarifas. Fue el disparador para que ese mismo día el bloque de diputados del FpV-PJ, que conduce Agustín Rossi, saliera a doblar la apuesta pidiendo una sesión especial para dos días después, el miércoles 18, con el fin de tratar los numerosos proyectos que proponían congelar las tarifas de los servicios públicos y retrotraer los precios.
A partir de ahí se generó una vorágine impensada para el Gobierno, que tras varias semanas intensas en la Cámara de Diputados, terminó en la aprobación de un proyecto de ley cuyo destino se definirá este miércoles en el Senado.
Final ajustado
Este miércoles la Cámara alta debatirá el proyecto proveniente de Diputados, aunque previamente a partir de las 11 deberá definirse otra controversia, de las tantas que abrió este debate: en la reunión de Labor Parlamentaria, los jefes de bloques resolverán la discusión planteada en torno al orden del tratamiento del proyecto sobre tarifas. Pasa que al pedir el lunes el oficialismo la convocatoria a sesión especial para las 14, planteó que en primer lugar se traten una serie de pliegos, y luego los tres proyectos que reemplazan al megadecreto de Desburocratización y Simplificación del Estado. Si se aprueban, serán ley.
Recién después se trataría el tema de las tarifas, y por último, según el temario elaborado por el oficialismo, una iniciativa del radical Juan Carlos Marino para modificar la Ley de Transplante de Organos.
La inclusión del tema tarifario en una misma sesión sorprendió a la oposición, que pensaba pedir una sesión especial para el proyecto sobre tarifas para las 11.
Está claro que la de este miércoles será una sesión extensa que podría tener un final más cerrado que el que se preveía, pero que está casi cantado: salvo sorpresas de último momento, el proyecto opositor será aprobado.
Cambiemos corrió siempre desde atrás, aunque en las últimas horas pareció revertir su estancamiento. El oficialismo cuenta en principio con los votos de sus 25 integrantes, y logró sumar este martes en el marco de una reunión del Presidente con el interbloque Federal a sus cinco integrantes: la salteña Cristina Fiore Viñuales (que responde a Juan Manuel Urtubey), su comprovinciano Juan Carlos Romero, el santafesino Carlos Reutemann y los neuquinos Lucila Crexell y Guillermo Pereyra.
Este martes por la mañana sorprendió que Rodolfo Urtubey se pronunciara abiertamente contrario al proyecto opositor, y por la tarde confirmara que votaría en contra. El mismo camino se especulaba que adoptaría el senador catamarqueño Dalmacio Mera, pero por la noche parlamentario.com pudo saber que votará junto al resto de su bloque, con lo cual Cambiemos sumaría 31 votos. El problema para el oficialismo es que ese parecería ser su techo.
En el caso de la oposición, el interbloque de Miguel Pichetto suma 24 senadores, pero a la hora de la votación tendría la citada baja de Urtubey. Carlos Menem suele ausentarse en las votaciones, con lo que en caso de no sufrir ninguna ausencia estaría sumando 22 votos.
Habrá que sumarles los 9 senadores del kirchnerismo -Cristina incluida-, los dos senadores puntanos, al menos dos de los santiagueños, más los monobloquistas Magdalena Odarda y “Pino” Solanas. 37 votos, suficientes para imponer un proyecto que necesita solo mayoría simple.
Los misioneros Maurice Closs y Magdalena Solari se abstendrán o ausentarán y no se confirmó qué hará la santiagueña Blanca Porcel de Ricovelli.
De tal manera y con esfuerzo, el oficialismo estaría logrando achicar la diferencia con la oposición unificada, pero no le alcanzaría para evitar que el proyecto sea aprobado.
Final cantado
Lo que no es seguro es que vaya a convertirse en ley este miércoles, pues son varios los opositores que adelantaron que plantearán sus diferencias durante el tratamiento en particular, y de imponerse alguna de esas modificaciones, que contarían con la anuencia del oficialismo, el proyecto volvería a Diputados, para convertirse en ley recién a mediados de junio. Y ahí sí, sobrevendría el veto, en pleno inicio del Mundial de Rusia.