Teruel admitió que durante años sintió atracción sexual por niñas
El hijo de Mario Teruel, quien continúa detenido, le dijo a su supuesta víctima que fue su primo quién le enseñó “todas estas pelotudeces”. “Luché bastante tiempo, ahora veo las nenitas y no me pasa nada”, sostuvo.
Luego que se conociera un audio, donde Lautaro Teruel, hijo menor de Mario Teruel, integrante y fundador de “Los Nocheros”, quien se encuentra detenido e imputado por el abuso sexual de una niña, le confesara el hecho a su supuesta víctima e intentara pedirle disculpas, se conocieron escalofriantes nuevos detalles.
Durante la conversación, Teruel dijo que durante años sintió atracción sexual por menores de edad. “Luché bastante tiempo, antes cada que vez veía una pendeja me quería alzar y después pasó el tiempo y me fui dando cuenta que nada, aparte una nena no tiene noción de nada y no tiene porque experimentar esas cosas”, expresó.
En ese marco, insistió en que “los primeros años le costó” pero está recuperado. “Hoy en día considero que ya no lucho con eso porque ahora veo las nenitas y no me pasa nada, no es que sigo ahí con que onda, si tuviese duda veo una pendeja le digo a mi viejo ayúdame, voy a un loquero o voy en cana digamos y no quiero ninguna de las dos”, manifestó.
Además aseguró que fue su primo quién le enseñó todas esas ‘pelotudeces’. “Hoy en día lo veo y él sigue siendo igual, lo hablé de mil maneras de adolescente, de más grande de todo con él pero el loco tiene su chip pero si él no decide cambiarlo le va a pasar algo parecido a lo mío pero bueno él sabrá, en realidad lo sabe pero no lo mide”, sostuvo.
La confesión a sus padres
Lautaro brindó detalles de la conversación que mantuvo con sus padres. “Mi viejo al principio me bardeó un toque pero después le dije que necesitaba hablar con vos, que yo sabía que me había moqueado que era algo con lo que venía luchando hacía mucho tiempo, y me dijo que le iba a costar a volver a confiar del todo”, expresó.
Además explicó que le confesó el hecho a la abuela de la supuesta víctima, quien luego se lo trasmitió a sus padres. “Como yo no le podía decir, uno de los días cayó al almorzar y me dijo les dije porque sentí que vos no lo podías hacer. Fue como ‘que empingue’ pero a la vez me sacó un re peso. Era un bajón. Todo ese día estuvieron cero conmigo, cero onda”.
Por último, dijo que no se considera un mal tipo. “Si yo sabría que soy un malvado que hasta el día de hoy tengo problemas no tengo necesidad de hablar con vos, de hablar con tu vieja, con mi viejo, me hago el pelotudo me voy a Salta pero como sé que no soy ese tipo de persona considere que era mucho más liviano sufrir una charla con toda la gente que quiero”.