Juicio Cintia Fernández: Son cuatro los testigos detenidos por falso testimonio
Las jornadas intensas dejaron en evidencia que la investigación en torno al homicidio de la joven estuvo mal realizada desde sus inicios.
Ayer en la antepenúltima jornada de testimoniales en el juicio por el homicidio de Cintia Fernández, la joven de 27 años que fue hallada sin vida dentro de su departamento en Parque la Vega, el tres de mayo de 2011, detuvieron a dos testigos, un ex policía y el hombre que se desempeñaba como encargado del consorcio del barrio.
Ya son cuatro los detenidos durante las audiencias, tres por falso testimonio y uno por incumplimientos en los deberes de funcionario público. Las medidas, todas solicitadas por el fiscal de Graves Atentados contra las Personas, Ramiro Ramos Ossorio, obedecen a que la investigación está mal realizada, lo que dificulta muchísimo el trabajo.
Ayer el ex policía Calixto Mamaní, quien era suboficial de la División de Trata de Personas dijo haber estado a cargo de tareas y pericias en el departamento de Cintia, pero al demostrar muchas inconsistencias el fiscal solicitó que se revisen los informes para saber si efectivamente había participado. Al ver que no estaba su firma en las actas fue inmediatamente detenido acusado de falso testimonio.
Otro de los testigos que fue detenido es José Antonio Ormeño, quien se desempeñaba como responsable del consorcio del complejo habitacional de Parque La Vega al momento de la muerte de Cintia Fernández. El testigo, citado por la defensa de Condorí dijo que iba a relatar una situación que había recordado recientemente, generando un ambiente de poca credibilidad.
Dijo que el 3 de Mayo de 2011 recibió el llamado de Ana Fernández tras haber encontrado el cuerpo de su hija y que cuando llegó, ya se encontraba personal policial. Dijo que intentó consolar a la madre de la víctima, que le brindó agua e incluso un café, entre otros detalles. Pero a la hora de responder preguntas comenzó a titubear y su relato no coincidió con el brindado durante la investigación, es por eso que también fue detenido y le secuestraron el celular.
Una tercer testigo, que es empleada judicial y amiga de la víctima, contó cómo se enteró de lo sucedido y que en esa oportunidad pidió información del caso a un empleado de la Brigada de Investigaciones que conocía. Él le mandó un mail con las fotos de la escena del crimen y con datos relevantes, al conocerse eso la mujer fue requerida por el juzgado para dar explicaciones.
Su declaración no sólo dejó entrever que la investigación no fue bien realizada, sino que todas las actuaciones estuvieron al alcance de personas que nada tenían que ver con el proceso, llegando al punto en que las fotos del cuerpo de Cintia fueron vistas por un sinfín de sujetos que sólo tenían una intención morbosa.
Llegando a las instancias finales del juicio tanto la fiscalía como los abogados se encuentran ante el desafío de realizar una reconstrucción de lo sucedido para lograr exponer sus alegatos y un pedido de sentencia en contra de Mario Condorí, el único imputado.
Paralelamente los abogados defensores fijan una postura respecto a la investigación y tanto en diálogo con InformateSalta como con otros medios aseguraron que no hay ni un prueba que involucre directa y fehacientemente a Condorí en la escena del crimen.