El Presidente decidió que Marcos Peña siga en la jefatura de Gabinete
Sin testigos indiscretos ni invitados adicionales, Mauricio Macri recibió el sábado, en su quinta Los Abrojos, a Marcos Peña, Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal.
En la intimidad de ese espacio arbolado y bucólico que le sirve de amigable refugio al Presidente, el núcleo inicial de Pro decidió que el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, fuera la única pieza a sacrificar del gabinete. También acordaron que sea el jefe de Gabinete quien siga a cargo de la campaña nacional, aunque esta vez sea "corriendo desde atrás", como lo definieron cerca de Peña en las últimas horas, publicó La Nación.
En esa reunión se decidieron, además, los términos de la "bienvenida" de Macri al reemplazante de Dujovne, Hernán Lacunza, que se oficializó a través de las redes sociales y en la que el Presidente elogió su "capacidad y trayectoria", a la vez que se mostró confiado en que el ya exministro de Vidal será "la persona indicada para esta nueva etapa". El primer encuentro entre Macri y Lacunza se producirá hoy en la quinta Los Abrojos, afirmaron desde Balcarce 50.
Según señalaron a La Nación desde distintos despachos, hasta el viernes se imponía la posibilidad de que el "cerebro" del Gobierno diera un paso al costado de la Jefatura de Gabinete y se concentrara solo en la campaña. Fue cuando circularon incluso los nombres de eventuales reemplazantes, como el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, o el senador Miguel Pichetto. "Marcos llegó hasta acá con Mauricio y va a seguir", resumieron ayer muy cerca de dos de los congregados en Los Abrojos.
Dentro del gabinete, y sin conocer los términos de ese encuentro, aún subsistían las dudas. "Con Lacunza conseguimos una cara nueva para comunicar medidas distintas, algo que Dujovne no parecía muy convencido de hacer", relataron desde el riñón del Gobierno. "Ahora habrá que ver qué cara política se pone al hombro la campaña", afirmó otro ministro, que recordó que Peña no habló en la reunión de gabinete ampliado del jueves, en la que Macri y otros oradores -Pichetto y Elisa Carrió, entre los más entusiastas- llamaron a redoblar esfuerzos y no dar la batalla electoral por perdida.