Sociedad14/07/2014

Comercios ilegales proliferan a los costados de las vías

Uno de los lugares preferidos para la instalación de puestos clandestinos de venta de comida, sin cumplir ningún requisito de salubridad, es a los costados de las vías. ¿Qué esperan para controlar?

Puestos de venta de pollo a la parrilla, empanadas, humitas, tamales, tortillas, bollos y otros, constituyen una postal que se puede apreciar a lo largo de todos los cruces de las vías del ferrocarril en la ciudad.

A la vista de todos, y sin contar con la más elemental norma de higiene, comienzan con una mesa y una silla. A las semanas ya tienen un toldo. Al cabo de un par de meses ya son verdaderos usurpadores del espacio público, y la mugre crece al ritmo de lo que prolifera el negocio y ganan en clientela.

Malos ejemplos
En calle Junín, casi Belgrano, empezó una venta de pollos a la parrilla. Modesto al principio, con un tacho para asar la comida, comenzó a funcionar los fines de semana este negocio que hoy ya cuenta con cartelería, toldos, e invade la zona con más de 6 de esos tachos.

Aprovechando la existencia de estos espacios que parecen no pertenecen a nadie, en la misma zona existe desde hace años otro negocio famoso por sus “fritangas”. No hace falta ser demasiado observador para detectar en Av. Belgrano esquina República de Siria, ese carro. Si los clientes pudieran ver la manera en que se lavan los utensilios, en el mismo balde de agua durante todo el día, y el aceite con que se preparan las comidas, seguramente su enorme clientela no sería la misma. Ni que decir la mugre que queda cuando se van.

Pero claro, parece que nadie ve este tipo de comercio ilegal, que afecta a los otros negocios de la ciudad que cumplen con todas las exigencias. Qué más agregar respecto a los peligros de comer en esos puestos donde la higiene es materia ausente. 

Fuente: www.informatesalta.com.ar