Luego que el gobierno nacional estableciera una cuarentena obligatoria desde hoy y hasta el 31 de marzo, las calles de la ciudad amanecieron prácticamente desiertas.

No obstante, muchos aprovecharon para recargar la heladera, ya que los supermercados quedan exceptuados de la medida a los fines de evitar el desabastecimiento. 

Desde muy temprano, se observaron largas filas en las puertas de los diferentes comercios en distintos puntos de la ciudad. 

Cabe destacar que es imperioso mantener la distancia, y la higiene de las manos.