Patricia Argañaraz sumó 7 nuevas denuncias y su situación es cada vez más complicada

En relación a la causa por el fideicomiso Virgen de Urkupiña de la Asociación Docente Provincial (ADP), se amplió la imputación por más denuncias que aparecieron en la fiscalía de Delitos Económicos Complejos, en contra de Patricia Argañaraz, la ex secretaria general que fue expulsada del gremio, consignó FM Profesional.

También se presentó el otro co-imputado Nicolás Demetrio Zissi y la próxima semana se espera que el hermano de la ex secretaria general del gremio docente, Raúl Dante Argañaraz, corra la misma suerte.

Se supo que habría un ofrecimiento de juicio abreviado para los integrantes del fideicomiso. En algunos casos, podría haber penas de cumplimiento efectivo y en otros solo inhabilitaciones para ejercer nuevamente cargos públicos. En caso de no llegar a una solución, se pediría el requerimiento de elevación de la causa a juicio donde las penas sería mayores, sobre todo para Argañaraz.

Durante el miércoles y jueves, se sumaron siete denuncias nuevas que se agregaron a las 22 que ya existían en sede penal porque en el ámbito civil, son más los hechos denunciados.

Cabe destacar que los imputados habían conformado un fideicomiso que tenía como fin la construcción de viviendas, dirigidas al público en general, pero cuando empezaron a haber irregularidades, se terminaron denunciando Patricia Argañaraz y Ana María Cerezo. Luego, el negociado continúo entre Zissi y Dante Argañaraz un tiempo hasta que aparentemente fue inviable o quizás hubo una malversación de fondos, tal cual ahora se investiga.

La única operación económica del fideicomiso era la construcción de 23 viviendas, que tenían 110 aportantes al proyecto y ya llevaba una demora de 2 años, pero no hubo ninguna terminada, ni alcanzaba la plata recaudada para pagar avances de obra.

De los informes bancarios surgiría que el fideicomiso recibió fondos desde la cuenta de ADP desde el 23 de agosto de 2017 al 27 de agosto de 2018, por una suma de $5.997.400, a pesar de que sólo existió autorización para dos transferencias, por $1.400.000 y $2.500.000. También se registraron transferencias desde la cuenta bancaria del fideicomiso Virgen de Urkupiña I a la empresa constructora CEYBA, la cual no tenía la obligación contractual de realizar una obra de esas características, conforme surge del contenido del contrato firmado y su adenda.