¿Qué es la minería en la nube?

La minería en la nube es un mecanismo para minar una criptomoneda, como el bitcoin, utilizando la potencia de la computación en la nube alquilada y sin tener que instalar y ejecutar directamente el hardware y el software relacionado. Las empresas de minería en la nube permiten a la gente abrir una cuenta y participar de forma remota en el proceso de minería de criptomonedas por un coste básico, lo que hace que la minería sea accesible a un mayor número de personas en todo el mundo. Dado que esta forma de minería se realiza a través de la nube, se reducen cuestiones como el mantenimiento de los equipos o los costes directos de energía.

Los mineros en la nube se convierten en participantes de un pool de minería, donde los usuarios compran una determinada cantidad de "hash power". Cada participante obtiene una parte prorrateada de los beneficios en proporción a la cantidad de potencia de hash alquilada.

Consideraciones claves

La minería en la nube consiste en minar criptomonedas alquilando o comprando equipos de minería a un proveedor de la nube, que es responsable del mantenimiento de los equipos.

Los modelos más populares de minería en la nube incluyen la minería alojada y la potencia de hash alquilada.

Las ventajas de la minería en la nube son que reducen los costes generales asociados a la minería y permiten a los inversores cotidianos, que pueden carecer de conocimientos técnicos suficientes, minar criptodivisas.

Las desventajas de la minería en la nube son que la práctica centraliza la minería en granjas y los beneficios son susceptibles a la demanda.

Cómo entender la minería en la nube

La minería en la nube aprovecha la computación en la nube con el fin de producir criptodivisas basadas en la cadena de bloques. La computación en la nube, en general, es una de las tendencias tecnológicas de más rápido crecimiento en la que los servicios informáticos como el procesamiento, la capacidad del servidor, los servicios de bases de datos, el software y el almacenamiento de archivos se acceden a través de la nube, a través de Internet. Estas empresas cobran en función del uso, al igual que nosotros pagamos por nuestro consumo de agua o electricidad.

Por otro lado, la minería es la columna vertebral del modelo de las criptodivisas, como el bitcoin. Es el proceso por el que las transacciones se verifican y se añaden al libro de contabilidad público, conocido como blockchain. También es el medio a través del cual se liberan nuevas monedas. Una combinación de ambos abre el mundo de la minería a personas en lugares distantes con poco o ningún conocimiento técnico e infraestructura de hardware.

Modelos de minería en la nube

La minería alojada es la forma más popular de minería en la nube. En este modelo, el cliente compra o alquila el hardware de minería ubicado en las instalaciones de un minero. El minero es responsable del mantenimiento del equipo y de asegurarse de que funciona como es debido. A través de este modelo, los clientes tienen un control directo sobre su criptomoneda. Las economías de escala de una granja minera garantizan que los costosos gastos asociados a la minería, como la electricidad y el almacenamiento, sean manejables. Sin embargo, este tipo de minería conlleva un coste inicial considerable.

La potencia de hash alquilada es otro modelo que se utiliza en la minería en la nube. En este modelo, la potencia de hash, o potencia de cálculo asociada a una criptomoneda, se alquila a una granja de minería. Los clientes obtienen una parte de los beneficios totales de la granja de minería de criptomonedas. Según los informes, el alquiler de potencia de hash es una forma popular de minería para altcoins (es decir, criptodivisas distintas del bitcoin). El proceso requiere que una persona abra una cuenta con una empresa de minería en la nube a través de su sitio web y seleccione ciertas cosas como el período de contrato y la potencia de hash.

Aunque la minería en la nube tiene ventajas, como una menor inversión en hardware y costes recurrentes, el proceso también tiene varias desventajas. Por ejemplo, las estafas en el sector han proliferado rápidamente con la popularidad de las criptodivisas. Además, existe la posibilidad de que los beneficios disminuyan. Las altcoins son especialmente vulnerables a la demanda, y una reducción de su poder de hash podría suponer menos beneficios para los mineros. Los modelos de minería en la nube también promueven la centralización de las criptodivisas, de lo contrario un ecosistema descentralizado.

Cómo funciona la minería de criptomonedas

La minería de criptodivisas como el bitcoin, ya sea a través de la nube o de forma local, no implica en realidad ningún tipo de minería. Y aunque este proceso genera nuevos tokens de criptodivisas que se conceden a los mineros, la operación de minería tiene un propósito mucho más crucial para mantener la seguridad de un libro de contabilidad distribuido como una cadena de bloques. La minería de Bitcoin la realizan ordenadores de gran potencia que resuelven complejos problemas matemáticos computacionales; estos problemas son tan complejos que no pueden resolverse a mano y son lo suficientemente complicados como para poner a prueba incluso a ordenadores increíblemente potentes.

Cuando los mineros de criptomonedas añaden un nuevo bloque de transacciones a la cadena de bloques, parte de su trabajo consiste en verificar que esas transacciones son correctas. En particular, los mineros de bitcoin se aseguran de que el bitcoin no se duplica, una peculiaridad única de las monedas digitales llamada "doble gasto". Con las monedas impresas, la falsificación siempre es un problema. Pero, por lo general, una vez que se gastan 20 dólares en la tienda, ese billete queda en manos del dependiente. Con la moneda digital, sin embargo, es una historia diferente. Los mineros utilizan su capacidad de cálculo para resolver problemas de criptografía.