Con más de 30º, otra pileta municipal vacía
Aunque suene increíble, los responsables de los natatorios municipales esperan los días de más calor hace para vaciar las piletas. Con el tratamiento adecuado no debería recambiarse el agua.
Los que saben coinciden en que no se debe estar haciendo el tratamiento adecuado en las piletas municipales y por eso el agua debe cambiarse varias veces durante la temporada, que dura 4 sólo meses.
Según los expertos consultados, con el mantenimiento adecuado, el uso de productos químicos en su proporción adecuada y realizando las tareas de limpieza y purificación; y controlando periódicamente el PH del agua; una pileta no requiere una renovación total del agua durante períodos prolongados.
“Toda pileta debe tener equipo filtrante. Ello sumado a la aplicación de productos químicos adecuados y en la proporción adecuada, permite que una piscina tenga incluso durante años la misma agua”, nos decía la responsable de una conocida empresa que se dedica a la construcción de piletas de natación y comercialización de productos para el agua.
Claro, para que ello sea posible debe haber gente que sepa, es decir técnicos especializados, e invertir en los productos en cuanto a cantidad y calidad. Esto parece que no ocurre en los 3 natatorios con que cuenta la Municipalidad capitalina.
Derroche
El problema no es que al vaciarla muchos se queden sin poder pasar un día sofocante en el agua, sino que ante un panorama de escasez como el que vive permanentemente la provincia es ilógico destinar millones de litros para una pileta cuando muchos no tienen el líquido en sus casas. Menos pensar que esa cantidad se usa, se tira, y se requiere de nuevo.
Hace unas semanas fue el espejo de agua del Carlos Xamena que debió ser fue vaciada y estuvo más de 15 días así hasta que se limpiaba y llenaba de nuevo (medio mes de enero, uno de los más calurosos de los últimos años).
Ahora es el turno de la pileta del balneario Juan Domingo Perón, frente a Plaza Alvarado. Para Roberto Avila, su responsable, con las lluvias el agua se echó a perder y por ello, cada 40 días cambian el agua. Coincidentemente, en Salta y en el mundo , las piletas se usan durante el verano, con tanta mala suerte que en esta zona del país llueve en el verano. O sea, la única solución sería cambiar el agua, porque de mantenimiento, nada.
Por lo tanto, las 1000 personas por día de promedio que concurren a esa pileta, deberán esperar a que Aguas del Norte autorice el llenado, cosa que no se sabe cuándo ocurrirá.
Fuente: www.informatesalta.com.ar