En 2019, el hombre fue sentenciado a la pena de un año y cuatro meses de ejecución condicional por delitos de violencia de género. Ante denuncias de incumplimiento de las reglas impuestas, la Fiscalía Penal de Violencia Familiar y de Género 1 volvió a imputarlo.

Mediante juicio abreviado, un hombre de 45 años fue condenado a la pena de tres meses de prisión efectiva por dos hechos de desobediencia judicial. Además, le fue revocada la condicionalidad de una sentencia previa, por lo que ahora deberá cumplir de manera efectiva una condena de un año y siete meses en la Unidad Carcelaria N°1.

El 16 de julio de 2019, el hombre fue sentenciado por el Tribunal del Juicio, Sala V, a la pena de un año y cuatro meses de ejecución condicional por los delitos de amenazas, desobediencia judicial (4 hechos), lesiones leves agravadas por la relación de pareja y el género en perjuicio de la madre de su hija y expareja.

En ese momento, el Tribunal le fijó dos años de reglas de conducta, entre las que se encontraban la prohibición de acercamiento al domicilio o cualquier lugar frecuentado por su expareja y de la de ejercer actos de violencia física y psíquica. Además le prohibieron comunicarse con ella por cualquier medio, ya sea telefónico, whatsapp o mensaje de texto.

El 31 de mayo de este año, la mujer radicó una nueva denuncia en la que aseguró que el hombre había violado la restricción en dos oportunidades y la había amenazado.

Luego de realizar la investigación correspondiente y reunir las pruebas, la fiscala Penal de Violencia Familiar y de Género 1 imputó al hombre y elevó la causa a juicio.