Una carrera en beneficio de una escuela quedó trunca por un polémico reclamo
El domingo estaba todo listo para que al menos 200 corredores compitan por medio de los cerros del paraje Las Cuevas a beneficio de la escuelita rural N°4474 pero inesperadamente apareció una persona frenó el evento aduciendo ser el propietario de todas las tierras de esa zona de la puna salteña y se presentó como el abogado Héctor Pescador.
En sus justificativos, aseguró que nadie le pidió permiso y que toda obra de mejora en la escuela debe suspenderse entre tanto el Estado provincial no logre la escriturar de los terrenos donde está edificada la escuelita, distante a 120 kilómetros de la capital salteña.
Según Pescador, hizo un reclamo ante las autoridades del Ministerio de Educación de que no se podía desarrollar ningún evento deportivo en su propiedad, la cual tendría una extensión de 14 mil hectáreas. Como tampoco, dice la misiva enviada a Educación de la Provincia, "no autoriza a realizar construcción y /o ampliación de la escuela porque está en propiedad privada".
Cabe recordar que el abogado en cuestión, fue el mismo que por allá en el año 2015 no permitió que transite el Dakar por esas tierras. Lo que motivó un cambio repentino en la organización internacional de ese rally. Por cierto que varias veces el abogado debió parar la intromisión de maquinaria de Vialidad de la Nación en el intento de buscar nuevos caminos alternativos a la ruta nacional 51. También denunció a empresas mineras que quisieron explorar sus tierras sin consentimiento del propietario.
Dudas sobre su adquisición
Según se conoció el letrado adquirió las tierras en 2009 de parte de un señor de apellido Barboza, hoy los hijos de este señor denuncian adquisición "fraudulenta" y ante esto Pescador dijo a Norte Visión.
"Mi adquisición fue legal. Los hijos de quienes me vendieron deberán responder ante la Justicia por lo que afirman. En esa zona todo el mundo se quiere apoderar de lo que no es suyo. Desde las mineras que se meten a buscar minerales, Vialidad que hace caminos sin consultar y supuestas comunidades originarias que no son tales y que me amenazan cada vez que voy por la zona a ver mi propiedad".
Pescador tiene la cédula parcelaria de las tierras a su nombre. Inclusive la escuela rural de Las Cuevas está bajo su propiedad: "Nunca nadie del gobierno me solicitó expropiación o compra de esa parte de la propiedad. Yo quise donar esa parte, pero nunca me prestaron atención. Quieren hacer ver que soy el malo de la película, pero la realidad es que soy el propietario legal y nadie respeta mis derechos".
En tanto la Directora de la escuela rural se mostró dolida y preocupada : "Habíamos organizado todo con la comunidad porque la escuela no tiene un salón de juego cerrado. Este señor dice ser el propietario y la comunidad dice lo contrario. Solo quería buscar la manera de recaudar fondos para esta escuelita que tanto lo necesita. Estamos destrozados. La escuela no tiene escritura y está por cumplir cien años en el 2025. Cuando difundimos el evento solidario salió este dueño a acordarse de que la escuela está en su propiedad" dijo a El Tribuno.
A esta opinión se sumó el sacerdote del Paraje que dijo "No puede haber progreso si no está claro y con la debida documentación la titularidad de la tierra. A mí me preocupa la gente del lugar. Gente sacrificada que logró que los desiertos sean habiltables. Es como una persona sin documentos, un indocumentado no puede ejercer sus derechos, los que hace años poseen tierras pero sin documentos están sin posibilidad de defenderse. La escuela va a cumplir 100 años, pasó demasiado tiempo para decir que los que viven ahí no tiene derechos"concluyó.