Casabella Dávalos criticó a Cargnello y a los fiscales por su accionar en el Convento
En medio de las novedades sobre la situación, denuncias, causas y otras cuestiones vinculadas al convento San Bernardo y sus religiosas, el doctor Juan Casabella Dávalos, abogado de Carlos Obeid, dio su parecer sobre las acusaciones a su defendido, apuntando contra monseñor Mario Cargnello.
En charla con Multivisión Federal, Dávalos señaló que está representando a Obei, de quien indicó que además de ser esposo de María Livia, la mujer quien dijo tener contacto con la Virgen del Cerro, afirmó que es un colaborador “de hecho” con las carmelas del convento pero “no les administra sus bienes”.
“Se lo involucra en el contexto de constante hostigamiento y violencia de género, institucional y económica, del arzobispo a las monjas”, dijo primeramente el abogado quien aseguró que éstas llevarían años denunciando al Vaticano los problemas con Monseñor. “Cuando la situación no daba para más, se concretó la denuncia” que trascendió el Jueves Santo de este año, sumó.
Sobre la supuesta agresión de Cargnello a una de las monjas, el abogado dijo que efectivamente pasó, que existe la grabación de ese golpe y que está a disposición de la Justicia. “Está filmado cuando el obispó la zamarrea y pega en el brazo” a la monja, aseveró junto a que Cargnello, en respuesta a la acusación, dijo que las monjas están manipuladas económicamente.
"No es que hubo un hecho de violencia cuando Cargnello zamarreó a la monja, esto ya venía de mucho antes”
Es aquí cuando se abre una causa por supuesta defraudación, investigándolo a Obeid pero que en esa averiguación “se dan cuenta que no es el administrador de los bienes del Convento, ese es el señor Marcelo Mentesana, quien tiene rendida todas las cuentas” que estarían todas aprobadas, incluso por el Vaticano, con solo una faltante de 9000 dólares que, según el abogado, Cargnello los tendría retenidos.
También apuntó contra la Justicia, a la cual la tildó como adepta a la iglesia católica. “Los fiscales prestan atención donde hay poder, en este caso, con el obispo”, manifestó antes de referirse al allanamiento de hace unos días en el convento, diciendo que ese término es “totalmente inexacto”, reiterando que las monjas habían apagado los timbres y por eso no abrieron las puertas, refutando igualmente declaraciones del abogado del Arzobispado, Eduardo Romani.
“Lo que intenta Cargnello es que se intervenga el convento, es un capítulo más de la violencia de la iglesia en su manejo interno, lo vemos ahora con el avasallamiento del obispo a las carmelas”