Cornejo admitió que se llevó una camioneta municipal "porque estaba deprimido"

Según un informe, se estima que el perjuicio causado al municipio por parte del ex intendente de Campo Quijano y la exsecretaria de Hacienda asciende a la suma de $78.137.148,36. Si consideramos el valor actualizado de esta cifra, equivaldría aproximadamente a mil millones de pesos.

Frente a la fiscal Penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Ana Inés Salinas Odorisio, el ex jefe comunal, quien está acusado de malversación de fondos e incumplimiento de los deberes de funcionario público, admitió haber comprado una camioneta Chevrolet S10 con fondos municipales a través de la emisión de cheques y que, al finalizar su mandato como jefe del Ejecutivo, la llevó a su casa.

Entre los insólitos argumentos, aseguró que tomó la decisión porque "se encontraba deprimido" y "esperaba que Folloni", actual intendente de Campo Quijano, "lo intimara a devolverla".

La causa inició el 28 de enero de 2020, con la denuncia del actual intendente de Campo Quijano, Carlos Héctor Folloni. Expuso que al inicio de su gestión evidenció un incumplimiento injustificado e intencional de la normativa vigente. Agregó que advirtió desorden y ausencia de documentación en el ejido municipal relacionada a la actividad contable. Esto le hizo sospechar de una actividad ilícita. Agregó el denunciante que a partir de la investigación se pudieron verificar las irregularidades del exintendente Cornejo.