Chanchos y caballos sueltos generan peligro en la ruta 36
Vecinos denunciaron situaciones sumamente peligrosas en la zona comprendida entre Campo Quijano y Rosario de Lerma, donde la presencia de animales sueltos genera a menudo la preocupación y malestar.
Primero fueron los chanchos, luego los caballos, e incluso un burro fueron parte de esta problemática. La última incidencia involucra a una tropilla de caballos que fue dejada sin control por sus dueños en el barrio Jovanovics, al costado de la ruta 36, en Campo Quijano.
Esta situación va más allá de la simple molestia de los residentes de la zona. Los animales sueltos causan daños materiales al romper alambrados y destruir la escasa vegetación que hay en el lugar. Sin embargo, el verdadero peligro radica en que durante las tardes y noches estos caballos suelen invadir la bicisenda y la ruta provincial 36, lo que representa un grave riesgo.
A pesar de los repetidos llamados de los vecinos a la Caballería, la Policía y las autoridades municipales, la situación persiste y los dueños de estos animales no dan señales de responsabilidad. Es increíble ver cómo estos caballos se mantienen en libertad, sin ningún tipo de control, a pesar del riesgo inminente que representan para la seguridad pública.
Los vecinos que se comunicaron con El Tribuno se encuentran en estado de constante alerta debido a la posibilidad de que ocurra una tragedia en el camino por los caballos sueltos. La cercanía de la fábrica boratera limita la posibilidad de embellecer la zona con vegetación, y a esto se suman estos animales que deambulan por la zona.
"Se necesita una acción inmediata de las autoridades locales. La seguridad de los vecinos y de todos los que transitan por esta ruta debe ser prioridad. Es imperativo que se tomen medidas para resolver esto antes de que ocurra una tragedia que lamentar. La irresponsabilidad de los dueños de los animales no puede poner en riesgo la vida de las personas ni causar más daño a la comunidad", dijo Mirta López, residente de la zona.
En días recientes unas vecinas que circulaban en bicicleta fueron sorprendidas por una situación peligrosa e inesperada: un grupo de caballos repentinamente se precipitó hacia la carretera y colisionaron con ellas. La situación se repite, ya que los caballos parecen aparecen de repente en diferentes áreas. La responsabilidad recae claramente en los dueños de los caballos, quienes los sueltan a pastar sin considerar las graves consecuencias que esto puede acarrear.