"¿Dónde está y quién lo protege?" Sigue prófugo el tirador del Paseo Güemes y crecen las dudas
Las preguntas no tienen respuestas. Pasan las horas, se acumulan las pruebas, los videos, los testimonios, pero nada se sabe de Matías Paz, de 30 años, conocido como “semilla” en Villa Soledad, quien es buscando intensamente por las fuerzas policiales luego que abriera fuego en el interior del bar Temple, ubicado en el Paseo Güemes, el pasado domingo después de la medianoche.
El sujeto, según el fiscal penal 2, Ramiro Ramos Ossorio, se habría ofuscado por la negativa de los empleados de venderle alcohol debido a su visible estado de embriaguez. En esas circunstancias, luego se supo se habría disparado en la pierna.
Tras el análisis de las primeras imágenes, se ordenó la detención por aparente “encubrimiento” de una mujer, a quien señalaban como su pareja. Sin embargo, horas después, la investigación dio un giro y fue liberada, puesto que ella misma habría sido víctima de la violencia del sujeto.
Horas después, se logró recuperar el arma utilizada en el hecho. Según se supo, fueron los propios familiares del acusado, quienes se acercaron a la Comisaría N° 1 y entregaron un bolso donde se encontraba guardado el revólver.
Seguidamente, el fiscal Ramos Ossorio dispuso la reserva de las actuaciones con el objetivo de lograr el esclarecimiento del caso, por el cual, podría imputársele al acusado el delito de tentativa de homicidio agravada por el uso de armas de fuego. “La pena tiene que ser de cierta gravedad o envergadura como para que sea proporcional a la actitud que esta persona expuso”, dijo.
Otro de los detalles que surgieron es que el acusado sería parte de una de las facciones de la barra brava del Club Juventud Antoniana.
La Policía, por su parte, incrementó la seguridad en el Paseo Güemes, entre otras medidas, frente al recelo y temor que sienten las personas que viven y/o trabajan en la zona.
Por último, y respecto a su captura, trascendió que Paz alcanzó a escapar de un inmueble en el que se hallaba refugiado, instantes antes de que la Policía llegara a detenerlo, sin que trascendiera cómo estuvo al tanto de los pasos de los policías.