Sociedad02/11/2023

El combustible que sale en tanques hacia Bolivia no es argentino y está bajo investigación en el país vecino

En nuestra provincia afectada por la escasez de combustible, la visión de camiones cisterna transportando gasoil y nafta a Bolivia a través del paso fronterizo de Salvador Mazza, en medio de largas filas en estaciones de servicio y vehículos inmovilizados por falta de combustible, ha provocado indignación y críticas en redes sociales.

Un vecino de Salvador Mazza expresó su frustración el miércoles por la tarde, reflejada en un video viral, sobre la situación de desabasto que golpea con mayor fuerza al norte del país: "Es una situación absurda, nosotros sin combustibles y, sin embargo, observamos cómo decenas de camiones cargados cruzan hacia Yacuiba".

"Son de Trafigura y llevan diésel, gasolina y GLP desde Campana (Buenos Aires), Mendoza y otras refinerías del país hacia Bolivia", señaló desde Tartagal uno de los tantos trabajadores petroleros que están en vilo desde el pasado 2 de octubre, cuando el complejo industrial de Campo Durán paró sus plantas de destilación atmosférica y reformado catalítico de naftas por falta de crudo para mantener operativos sus sistemas de procesamiento.

"Desde hace una semana se ven menos camiones, pero son alrededor de un centenar los que atraviesan la frontera cada día. Algunos choferes nos manifestaron que muchos camiones no fueron despachados en los últimos días por temor a sufrir hechos de violencia, porque los ánimos están caldeados", remarcó un periodista de Salvador Mazza.

Fuentes de organismos con presencia en la frontera precisaron que "son embarques que llegan en buques tanques a puertos y refinerías del país, como las de Zárate, San Nicolás, Campana o San Lorenzo, y luego son cargadas en camiones que empresas como Trafigura y Vitol transportan hacia Bolivia con los correspondientes permisos internacionales y nacionales". 

"No es combustible argentino, sino diésel, gasolina y otros productos terminados adquiridos por Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Bolivia en mercados de ultramar", explicó una fuente oficial, tras exponer a El Tribuno declaraciones de tránsito aduanero que así lo certifican.

Desde el pasado 15 de junio, la Fiscalía General de Bolivia investiga una denuncia contra el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, y otros funcionarios de esa empresa estatal por la importación de combustibles con presuntos sobreprecios.

La querella fue presentada por dos exministros del gobierno de Evo Morales, Carlos Romero y Teresa Morales, quienes denunciaron que YPFB importó diésel y gasolina a través de Trafigura por un monto cercano a los 2.300 millones de dólares en los últimos cinco años, con presuntos sobreprecios por cerca de US$ 700 millones en perjuicio de la estatal boliviana.

Los exfuncionarios del vecino país también solicitaron al Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) que investigue posibles operaciones de lavado en la provisión de combustibles a Bolivia por parte de Trafigura.

La investigación abierta en Bolivia abarca las adquisiciones que YPFB realizó entre 2018 y lo que va de 2023 con Trafigura y otras empresas intermediarias, como Montealegre y Vitol, e incluye contratos que se cerraron en Argentina y otros países de la región, según precisaron Romero y Morales a los diarios El Deber y La Razón.

Ante las denuncias, el gerente de Planificación Corporativa de YPFB, Danny Roca, aseveró que a causa de la invasión rusa a Ucrania el precio de los combustibles se vio "incrementado, al igual que los premios (comisiones)".

El vicepresidente de Administración, Contratos y Fiscalización de YPFB, Enzo Michel, señaló que la importación de combustibles tiene en Bolivia dos grandes puntos de acceso. "El primero, por la zona Sur Oriente, es mucho más costoso, ya que incluye transporte en buques hasta puertos en Argentina o Paraguay, traslado a tanques o barcazas, hasta completar la logística con cisternas", sostuvo Michel en relación al ingreso de camiones tanque a través de las fronteras de Salvador Mazza y Aguas Blancas (Salta). "En los puertos de occidente (Chile y Perú), la logística es menos complicada", agregó el funcionario del gobierno de Luis Arce.

Los exministros de la gestión de Evo Morales aseguraron que "existe un monopolio de las proveedoras de los combustibles líquidos" en el vecino país y que "Trafigura concentra el 90%" de las contrataciones que se investigan. El gerente de Planificación Corporativa de YPFB reconoció, en una conferencia de prensa, que la participación de la citada multinacional "es importante", pero afirmó que solo es del 20%. "Tenemos otros proveedores y no solo dependemos de Trafigura, que opera en el Sur Oriente", sostuvo.

Ante esas declaraciones, los exfuncionarios bolivianos que denunciaron las contrataciones insistieron en que la participación de Trafigura es muy superior, porque intermedian en las importaciones otras empresas vinculadas con esa multinacional.

En la denuncia también se aseguró que "cada día 350 cisternas con combustible subvencionado salen desde el país (Bolivia) para el contrabando hacia Perú, Chile, Brasil y Paraguay". Roca desligó a YPFB de ese movimiento. Manifestó que el control del contrabando es tarea de otras instituciones, como la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y el Viceministerio de Defensa Social y Sustancias Controladas de Bolivia. 

"Nosotros tenemos la misión de garantizar el abastecimiento", aclaró, sin dar mayores explicaciones.