12/03/2024

Abuso en una fiesta de "estudiantes" en Navidad, la agarró de los pelos y le gritaba "levantate"

La sentencia, dictada contra Facundo fue el Día de la Mujer por el juez Raúl Sángari, de la Sala II del Tribunal de Juicio. En su fallo, el magistrado tuvo en cuenta el relato de la víctima y la confesión del acusado, quien reconoció su responsabilidad penal por el delito de abuso sexual simple.

El caso, según surge del fallo, ocurrió el 25 de diciembre de 2020, entre las 6 y 7 de la mañana, en una casa de calle Caseros, lugar donde varios estudiantes universitarios se habían reunidos para festejar la Navidad.

En ese marco, la víctima, menor de edad al momento del hecho, contó que asistió a la fiesta con su hermana y una amiga. Explicó que, mientras bailaba, se le acercó el acusado, quien le ofreció un trago. Luego de beber, vio que su hermana y amigas se fueron al baño.

En esos momentos, es que comenzó a sentirse mareada, por lo que quería tomar aire. Fue entonces que el joven se ofreció a llevarla al patio del inmueble, pero no fue ese el destino al que fue conducida, sino al garaje, donde alcanzó a ver una cama, así que se recostó y se durmió debido a los efectos del trago que había ingerido.

Luego de unos minutos, cuando despertó, según conoció InformateSalta sintió que tenía el miembro viril del acusado en su boca y que con su mano el estudiante le empujaba la cabeza. Después, según lo agregado, sintió un golpe en su cabeza y recobró la conciencia, ya que sintió que le ardía su vagina, momento en que descubrió que estaba siendo violada.

En esos instantes, comenzó a escuchar a su hermana que golpeaba la puerta y gritaba su nombre para saber si se hallaba en dicho cuarto. Recordó que sus brazos no tenían fuerzas, que quiso levantarse y se cayó al piso. Luego, el acusado la levantó de los pelos y le gritaba “Levántate” y la tiró de nuevo a la cama. 

 Encerrada

Desde ese lugar, la joven vio que el acusado caminaba por todo el cuarto y se apoyaba en la puerta para evitar que entraran, pero no logró su cometido, pues su hermana logró ingresar a la habitación, viendo a la víctima prácticamente desnuda, hecho que la llevó a indagar si el imputado le había hecho algo.

Expuesto el ataque sexual, el propio acusado reconoció su responsabilidad penal en el hecho de abuso, instancia en que el fiscal Federico Obeid informó que habían acordado con la defensa y la querella, la resolución del caso mediante un juicio abreviado.

Como resultado de ello, se estableció una pena de tres años de prisión efectiva por el delito de abuso sexual simple. Dicha pena fue convalidad por la víctima, la que prestó conformidad para que se formalice la resolución a través de un proceso abreviado.