Las universidades nacionales atraviesan la segunda jornada de paro a nivel país, donde se solicita una recomposición salarial para personal docente y no docente, como la vuelta del FONID para los docentes de colegios secundarios de estas instituciones formadoras. 

Diego Maita, secretario general de Adiunsa, en InformateSalta, dio a conocer el desfasaje que existe entre el poder adquisitivo del docente en noviembre de 2023 con abril del 2024, marcando un salario casi 60 puntos debajo de la inflación, por lo cual el pedido de recomposición salarial es fundamental.

La inflación entre diciembre y abril llegó a 106%, mientras que el aumento salarial entre diciembre y mayo fue apenas superior al 60%, explicaba a InformateSalta, por ello la recomposición es necesaria, logrando un porcentaje mayor al percibido actualmente: “no significa un aumento de salario, significa tratar de volver al poder adquisitivo de noviembre”. 

Consultado por el sueldo actual y a cuanto debería ascender, Maita tomó para ejemplificar el cargo de auxiliar docente con 10 años de antigüedad, el cual se encuentra aproximadamente en un bruto de 400 mil pesos, que, sacando aportes y cargas, llegaría a 320 mil pesos en bolsillo. 

Para lograr que llegue al poder adquisitivo de noviembre, debería ascender a 450 mil pesos: “es casi la mitad de lo que es la línea de pobreza, que, a valores de abril, son un poquito más de 800 mil pesos, con la inflación de mayo podría estar cerca de los 900 mil pesos” explicó. 

Durante la primera jornada de lucha el acatamiento en colegios secundarios fue del 100%, mientras que a nivel universitario osciló entre un 60 a 80%. 

En caso de no tener novedades ante las solicitudes, seguramente continuarán con las medidas de fuerza, que pueden ser otros paros, concluyó el secretario general de Adiunsa.