“La danza es selectiva, no discriminatoria”
Así lo manifestó Alejandra Cercena, directora de la Escuela Oficial de Ballet de la Provincia, quien negó que haya discriminación a la hora de inscribir a los niños. “Respetamos los valores latinoamericanos de bailarines profesionales”, dijo.
Las condiciones morfológicas de un bailarín profesional no se alejan de los parámetros saludables, sin embargo el entrenamiento es muy riguroso, por lo que es necesario tener una alimentación estricta y características físicas determinadas. Esto en relación a la denuncia de ayer de una madre quien intentó inscribir a su hija de 9 años en la Escuela de Ballet de la Provincia, pero los requisitos morfológicos exigidos consideró eran extremos y excluyentes.
La directora de la Escuela Oficial de Ballet de la Provincia explicó que para realizar la danza de manera profesional hay que cumplir con ciertas pautas. Sostuvo que no es una academia de danza donde uno lo puede practicar como hobbie, sino que necesita mucha preparación.
“El Ballet es selectivo, no discriminatorio. En la escuela respetamos valores que responden a instituciones profesionales latinoamericanas. Es fundamental tener un cuerpo muy saludable, por eso se necesita la certificación de un médico clínico que apruebe que un niños puede hacer danza clásica”, explicó Cercena.
En este sentido, la directora aclaró que no es la misma certificación que para realizar cualquier actividad física o deporte, ya que hay condiciones que se deben cumplir como no tener pie plano, no tener problemas en la columna, no tener desnivelada la cadera, etc. Algunas de las características físicas que se buscan en los bailarines profesionales son la de un cuerpo estilizado, muslos alargados, cuello alto, cabeza pequeña, entre otros.
“La formación profesional de bailarines conlleva un entrenamiento muy riguroso, por eso necesitamos que tengan una estructura y un peso adecuado. Es muy triste que relacionen a los bailarines con la bulimia y la anorexia, porque justamente el cuerpo de los profesionales debe tener muchos nutrientes por las exigencias”, dijo la directora.
Cercena destacó que cualquier persona puede hacer danzas, sobre todo porque es una práctica muy sanadora. De hecho hay muchos institutos o academias donde uno puede ir a aprender a cualquier edad. Sin embargo no cualquiera lo puede hacer de manera profesional ya que hay determinados tipos de cuerpos que pueden llegar a correr riesgos.
La directora explicó que en la Escuela Oficial de Ballet intervienen profesionales de todo tipo que acompañarán en todo momento a los bailarines, entre ellos nutricionistas y psicólogos. Además, aclaró que cada año se realizarán nuevas convocatorias, por lo tanto si hoy un niño quiere ingresar y tiene sobrepeso, puede adquirir correctas conductas alimentarias para adaptarse a los requisitos necesarios.
"Vamos a dar charlas en escuelas para que los niños que quieran ser bailarines entiendan la necesidad de una alimentación saludable y un cuerpo sano", dijo Cercena.
Fuente: InformateSalta