Estudian el "idioma" de los gatos para entenderlos
Científicos analizan el sentido de los tonos y el acento del 'habla' felino. Creen que en unos cinco años podrán descifrarlo.
¿Qué piensan cuándo nos miran? ¿Por qué sentimos que "encierran un saber" o que algo "se callan" acerca de ellos o de nosotros? Para los que tienen gatos estas no son preguntas antojadizas. Algo pasa con ellos. "Algo" encriptado "esconden" en sus modos felinos y, sobre todo, en sus diferentes maneras de maullar, cuando no optan por matarnos de indiferencia y se mantienen callados. Pues bien: para dentro de unos cinco años podríamos descifrar lo que "dicen" los gatos cuando emiten sus sonidos. Y no es puro bla bla ni simple miau miau: la noticia tiene certificación científica y proviene de Suecia, más precisamente de la Universidad de Lund.
Estudios y observaciones ya realizados dejan en evidencia que los felinos salvajes dejan de maullar cuando alcanzan la adultez ya que entonces no necesitan llamar la atención de sus madres o padres para ser atendidos ni alimentados. Pero desde que el hombre comenzó a compartir su vida con los gatos (hace miles de años, dicen) el fenómeno de la domesticación propició que los pequeños felinos inauguraran un sistema de comunicación con los humanos que no terminamos de comprender del todo. Es cierto que sus voces, y actitudes suelen resultar bastante elocuentes y al mismo tiempo desconcertantes; los escuchamos, reconocemos muchas de sus señales visuales, pero siempre nos queda espacio para la duda.
A partir de estas evidencias, los estudiosos de la Universidad de Lund iniciaron una investigación con el fin de interpretar el significado de los sonidos que emiten los gatos. Para ello, grabarán hasta 50 gatos en diferentes lugares para ver cómo sus estados de ánimo afectan a sus maullidos cuando están contentos, felices, enfadados o tienen hambre y tratarán de identificar las diferencias en sus patrones fonéticos.
"Parece que los gatos pueden cambiar conscientemente la entonación o la melodía de su voz, tal vez para transmitir determinados mensajes", afirma Susanne Schotz, investigadora principal y especialista en fonética.
Un propósito implícito en la investigación es ayudar a los dueños de gatos a comunicarse mejor con ellos. Para eso analizarán sus diferentes reacciones cuando escuchan a niños o adultos y si sus respuestas difieren según el lugar en el que se produzcan estás "conversaciones"
Mientras esperamos que los investigadores suecos revelen algo de todo esto, tal vez sea oportuno meterse con un libro del antropólogo Marc Augé que acaba de publicar Adriana Hidalgo -El tiempo sin edad: Etnología de sí mismo- en el que el autor analiza la relación de los seres humanos y los animales domésticos.