Caso Mariela López: el paramédico rodeado por sus contradicciones
Si bien en un principio se mostró abrumado por la supuesta y sorpresiva desaparición de su pareja, a medida que los investigadores volvieron a preguntarle otros detalles, Balcarce se contradijo y quedó demasiado expuesto.
Policiales27/04/2018En su denuncia, del 19 de marzo pasado, radicada en la comisaría Segunda, Cristián Balcarce, un paramédico de 40 años, aseguró que su pareja, Mariela López, la profesora de Aerobics, se había marchado a la provincia de Jujuy, aparentemente, en un remise “trucho”.
Balcarce, en seguida, agregó que no estaba seguro si Mariela abordó o no un remise en la zona de la terminal de ómnibus, pero si reiteró que desde esa fecha, 19 de marzo, ya no estaba en la casa que ambos ocupaban, en calle La Rioja al 1.300.
Sostuvo que ya se había contactado con familiares de López, quienes residen en Jujuy, los que le manifestaron que iban a realizar la denuncia del caso, pues Mariela no había llegado. Adujo estar muy preocupado y solicitó que se tomen medidas urgentes para localizarla.
Al momento de describirla, señaló que la misma, en la terminal, vestía una calza floreada y una campera negra deportiva. Si bien estos datos ayudaron, y, en ese momento, no levantaron sospechas, a los días generaron serios interrogantes que dejaron a Balcarce en el ojo de la tormenta.
Sucede que a los tres días de su primer denuncia, o sea, el 22 de marzo a las 4.30 de la madrugada, el paramédico regresó a la comisaría Segunda para hacer una ampliación, oportunidad en la que se mostró interesado en aclara que el día de la supuesta desaparición de la profesora, en realidad él se marchó antes a su trabajo.
Dijo que ese día se fue a trabajar, y en la casa quedó Mariela, y que la intención de la misma era viajar a Jujuy, pero que no podía confirmar si realmente logró hacer el viaje o “si salió de la vivienda”. Obviamente, esta ampliación de denuncia, despertó más dudas en torno al paradero de López.
Los policías del Sector 2 se preguntaron porque ese cambió de relato, si previamente se mostró seguro de que López había viajado a Jujuy, incluso describió la ropa que su pareja vestía cuando estaba en la terminal.
Estas contradicciones, sin embargo, no fueron las únicas, pues cuando los investigadores hablaron con un familiar de Mariela, éste dijo que Balcarce lo llamó y le reveló que la había llevado hasta la terminal de ómnibus, donde la dejó y no la volvió a ver.
Previamente, en su ampliación de denuncia, el paramédico había asegurado que se fue antes de la casa a su trabajo y que no acompañó a Mariela a la terminal, mientras el familiar con el cual se comunicó el acusado, aseguró contrario.
Cuestión de tiempo
Para los investigadores, Balcarce se enredó solo en su afán por intentar armar una coartada que le asegure la impunidad. Buscó cambiar el relato a medida de que no lograba encajar las piezas, accionar que dejó un camino de migas para los policías, quienes en definitiva se dedicaron a levantarlas y armar el rompecabezas.
Al respecto, se pudo saber que los investigadores tienen varias piezas encastradas y que, en definitiva, sólo resta una prueba más, la confirmación de que el cadáver hallado en la localidad de Lumbreras, en el sur de la provincia, es efectivamente el de Mariela López.
Estas tarea, como ya se mencionó, se encuentra en manos de los peritos del CIF, quienes, por la complejidad de la pericia, tendrán todavía unos días más para lograr esa certificación, la cual primero deberá ser dada a conocer a los familiares de Mariela, si es que se trata de una prueba positiva.