Las imágenes son crudas. Duras. El video que captó el hecho a fines del año pasado es corto pero se transformó en la clave para que la fiscal de Homicidios Claudia Alejandra Ríos definiera la imputación en su contra.
Se trata del expediente que mantiene en la Unidad Penal VII Agua de las Avispas con prisión preventiva a Yanina Belén Diez, la mujer de 27 años que prendió fuego a la novia de su ex pareja y la mató a fines de diciembre del año pasado sobre calle Lisandro Moyano 2800 casi Libertad, en Las Hera,Mendoza.
El joven también resultó gravemente herido y salvó su vida luego de varios días de internación.
Las imágenes de una cámara de seguridad de la zona a las que accedió El Sol duran 13 segundos. Se observa a la pareja compuesta por Karen Estefanía Roux (22) y Fernando Rojas (25) esperando un colectivo cuando aparece una tercera persona, la agresora.
Una mujer que, fuera de sí porque no aceptaba la nueva relación de concubinato de su ex pareja, roció a las víctimas con combustible y las prendió fuego.
La atacante, identificada con el paso de las horas como Yanina Belén Diez, escapó rápidamente de la escena. Pero las víctimas corrieron envueltas en llamas.
En el video se observa que Roux intentan savlarse hacia una dirección y Rojas busca ingresar a una propiedad pidiendo auxilio. Luego se corta. Ambos con el fuego desde la cintura para arriba. Tal la importancia de la combustión provocada, que no se pueden apreciar sus rostros.
Karen Roux murió cuatro días después. Jamás se pudo recuperar las lesiones que la causó el fuego. En el Hospital Lagomaggiore diagnosticaron más del 50 por ciento del cuerpo quemado.
E indicaron que se encontraba con respiración mecánica asistida, presentaba fallas renales y le habían aplicado adrenalina en el corazón.
Por su parte, Rojas pudo salvar su vida. Se recuperó y fue clave para el avance de la instrucción.
Gracias a su declaración, también la de otros testigos y el análisis de las imágenes, la fiscal Ríos entendió que se estaba frente a un homicidio agravado. Esto es aprovecharse del estado de indefensión de las víctimas.
Técnicamente, así fue la acusación fiscal: homicidio agravado por alevosía y homicidio agravado por el vínculo y por alevosía en grado de tentativa.
En las últimas horas, trascendió que la representante legal de Diez, Silvina González, intentó acordar un juicio abreviado con el Ministerio Público. Básicamente, Diez reconocería el hecho para luego ser condenada.
Con la calificación de base, la única pena posible era la de prisión perpetua. Pero al admitir el hecho en un debate abreviado inicial recibiría una pena menor con modificación de la calificación. Se hablaba de 30 años de cárcel.
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Sin embargo, la detenida cambió de opinión y el pacto de la defensa, y la fiscalía se cayó.
De todas formas, se supo que Ríos continuaba trabajando en el expediente –se encuentra prácticamente terminado– y en los próximos lo elevaría a juicio.
Fuentes judiciales contaron que la joven Diez es problemática y así ha quedado en evidencia en sus días como presidiario.
Explicaron que, en un primer momento, había aprobado admitir el ataque en un juicio abreviado pero con el paso de los días cambió bruscamente de opinión porque pretendía una pena mínima y se mostró agresiva.
Por todo esto, terminó por romperse el trato entre las partes hace pocos días y a partir de ahora, si llega al debate por jurado, serán doce los ciudadanos los que definan su futuro.
Si la hallan culpable, la única pena que le corresponde es la de prisión perpetua.
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