Es “campeona de campeonas” de la empanada salteña y revela todos sus trucos para que salgan perfectas
Sociedad30/04/2022A Norma Ruiz le hizo falta un incentivo. Un premio delante de sus ojos para que estos se abrieran por completo. Un empujón final para entrar en razón y darle rienda suelta al sueño de vender sus empanadas, las que pocos conocían pero tanto disfrutaban.
La mujer de 63 años, nacida y criada en Salta, descubrió a los 9 el secreto de “la empanada perfecta” a través de su padre. Desde la masa hasta el relleno. De la cacerola a la mesa.
Hace los repulgues con ambas manos. 16 pliegues para considerarla ideal y 17 para decirle a una de sus hijas “está bien, pero más no”. Norma atesoró el legado de su papá y lo convirtió en su propia receta, la que vende por encargo, por docena y solo los sábados y domingos.
Elabora empanadas de carne cortada a cuchillo. También de queso o pollo, aunque las primeras son su especialidad. Fue por ellas que se hizo conocida en su provincia. “En 2017 mi hija me anotó en un concurso de empanadas. 147 participantes. Nosotras fuimos solas, con un gazebo, una mesa y dos docenas”, recuerda.
Norma cocina alrededor de 15 kilos de carne por fin de semana (Foto: TN).
En su casa del Barrio San Cayetano, allí donde convirtió un cuarto inutilizado en su cocina y “local” de atención al público, le cuenta a TN que increíblemente, pese a su poca expectativa y nula esperanza de triunfar, ganó aquel concurso.
“Fue en el Centro Vecinal Villa Mónica. El resto de los concursantes tenía unos puestos hermosos, nunca pensé que podía ganar pero lo logré. Y ahí mi vida cambió por completo”, explica.
La historia de Norma, la “campeona de campeonas” de la empanada salteña
“Nací en Salta, me casé a los 15 años. Tengo cinco hijas mujeres: Valeria, Noelia, Thalia, Nadia y Tamara. Y soy abuela de tres nietos varones”, sintetiza Norma. La necesidad la llevó a trabajar desde muy joven. Fue cajera en un supermercado durante muchos años y luego se dedicó a la gastronomía. “Mi fuerte era ese”, dice.
En la puerta de su casa y su local de empanadas junto a sus cinco hijas (Foto: TN).
Fue empleada en la cocina de un restaurante (por poco tiempo) y tuvo un puesto en el Mercado San Miguel de su provincia: “Elaboraba los platos, toda clase de comida. Iba a eventos, me encantaba”, rememora.
Pero llegó el concurso de 2017, la consagración y un despertar interno, acarreado por el premio mayor de su vida: sus hijas. “Me volvieron a anotar en 2019. Esta vez en uno organizado por la Secretaría de Turismo De la Ciudad de Salta”, expresa.
El requisito excluyente para inscribirse en aquel certamen era haber ganado algún concurso de empanadas. Norma contaba en su haber con el trofeo reciente y aceptó el desafío de competir contra otras 23 concursantes campeonas.
Los viernes por la tarde suele hacer el relleno y lo deja que tome sabor para cocinar el sábado y el domingo (Foto: TN).
“Se llamó ‘Campeona de Campeonas de las Empanadas’. Fue el último torneo que se realizó entre campeonas. Y lo gané. Salí campeona de campeonas”, cuenta Norma, orgullosa, mientras exhibe el galardón que hasta hoy nadie pudo arrebatarle.
Dicha consagración originó el nacimiento de “Empanadas Ali”, su negocio, el que lleva una abreviación de su segundo nombre: Alicia. Norma se jubiló hace tres años e invirtió parte de sus premios en la remodelación de un cuarto y la compra de hornos y cocinas.
“Sábado y domingo elaboro. Hago unos 15 kilos de carne. No cuento la cantidad de empanadas que realizo, pero son muchas lógicamente. Se comunican al celular de Nadia y los clientes me encargan las docenas. Ella toma los pedidos”, explica.
Es su hija quien aporta el dato contundente que Norma desconoce: más de 130 docenas de empanadas, como mínimo, son las que elabora la mujer por fin de semana. “Los viernes solo vendo si me piden. Tienen tiempo de pedirme desde las 10 hasta las 15, tanto sábado como el domingo”, aclara.
Los consejos y secretos para elaborar la empanada perfecta
Según Norma existen una serie de pasos e ingredientes que son fundamentales cumplir para que el producto final sea el esperado. “Acá se acostumbra a hacer con mucha papa, yo no. Apenitas le pongo”, dice.
Uno de sus secretos: la empanada no debe tener más de 17 repulgues (Foto: TN).
Y continúa: “Las empanadas son con ají picante, cebolla de verdeo, huevito duro, la carne cortada a cuchillo. Y bien jugosa. Te repito: yo le pongo muy poca papa. Y condimentos lo justo. Comino, ají y pimentón. La carne en daditos muy chiquitos, lo mismo la papa, no se tiene que ver”.
“Lo primero es poner la grasa. Rehogar las cebollas, blanquearlas, incorporarle los condimentos y luego la carne picadita. Se tiene que cocinar bien. Ahí le agregás las papitas -previamente hervidas- el huevo y la cebolla de verdeo”, explica.
Luego agrega: “Tiene que ser todo de primera calidad para que salga bien. Si compro carne de segunda mano no obtengo el resultado que yo quiero”. Y remarca: “El horno tiene que estar bien caliente. Si no está bien caliente se secan las empanadas. Son cinco minutos para que salgan bien jugosas”.
Horno bien caliente y cinco minutos de cocción para que las empanadas queden jugosas (Foto: TN).
“El relleno lo hago sola, nadie entra a la cocina. Cuando esté segura la voy a dar (la receta). Sé que esto es familiar y si la voy a dejar será para mis hijas”, indica.
Norma sueña con que su proyecto permanezca expandiéndose hasta convertirse en un restaurante, con más oferta gastronómica, mesas y sillas en la calle, y la posibilidad de crear puestos de trabajo.
Norma y su familia venden más de 130 docenas de empanadas por fin de semana (Foto: TN).
“Estoy contenta y feliz porque me dedico a lo mío. Trabajé desde muy joven. Me costó mucho armar este lugar, soy una mujer humilde, emprendedora, no bajé los brazos. Vendí sándwiches para poder comprar cosas, me costó”, dice.
“No termino cansada, me gusta. Me encanta cocinar, todo es lindo para mí. Lo primordial es hacer las cosas con amor. No necesitás tantos ingredientes para la cocina: hacé con amor y sale todo bien”, concluye Norma. /TN