Ante el Parlamento británico, Carlos III prometió respetar los principios constitucionales

El rey Carlos III del Reino Unido afirmó este lunes en su primer discurso ante los miembros del Parlamento británico que reinará de forma "desinteresada", como lo hizo su madre, Isabel II, y con respeto "a los principios constitucionales".

Carlos recordó el legado de la soberana, fallecida el pasado jueves a los 96 años, en respuesta a los mensajes de condolencia que previamente le transmitieron los presidentes de la Cámara de los Lores (alta), John McFall, y los Comunes (baja), Lindsay Hoyle, en el edificio de Westminster Hall.

McFall y Hoyle alabaron la labor "de liderazgo y servicio" de su difunta majestad y prometieron lealtad al nuevo monarca, con la confianza de que reinará en base al principio constitucional de monarquía parlamentaria.

Carlos III, de 73 años, se dirigió este lunes por primera vez al Parlamento y aseguró "sentir el peso de la Historia" tras la muerte de su madre.

"Presentándome ante ustedes hoy, no puedo evitar sentir el peso de la Historia que nos rodea y que nos recuerda las tradiciones parlamentarias vitales a las que los miembros de ambas cámaras se dedican con tanto compromiso", afirmó.

Acompañado por la reina consorte, Camila, el nuevo soberano escuchó en Westminster las condolencias que le ofrecieron de ambas Cámaras. Esta tarde hablará ante el Parlamento escocés.

Westminster Hall, la sala en la que habló Carlos ante los parlamentarios, es la más antigua del palacio de Westminster, y se ha utilizado en el pasado para discursos ceremoniales, como los de los Jubileos de Platino, Oro y Diamantes de Isabel II.

Se espera además que sea en Westminster Hall donde yacerá el cuerpo de la reina desde este martes, tras ser trasladado desde Edimburgo.

Tras cumplir sus compromisos en Londres, Carlos III y su esposa volarán más tarde a la capital escocesa, donde acudirán al palacio de Holyroodhouse —sede del Parlamento escocés—, donde el monarca inspeccionará la guardia de honor.

Carlos III, que fue proclamado oficialmente rey el sábado, ha arrancado su reinado con una agenda repleta a raíz del fallecimiento de su madre.

Tan solo dos días antes de morir, Isabel II había recibido —el martes anterior— a la nueva primera ministra Liz Truss, quien sucedió a su colega conservador Boris Johnson.