El Ente Regulador de los Servicios Públicos inició un esquema de control sobre los barrios privados, abiertos y cerrados, que actualmente carecen de control en la captación, transporte, tratamiento y distribución del agua potable.
El Directorio del Organismo dispuso que personal técnico y jurídico verifique que los desarrolladores privados no extraigan más agua que la autorizada por la Secretaría de Recursos Hídricos, según las disponibilidades de las fuentes, y también la instalación de caudalímetros para evitar los excesos de consumo.
Se controlaron los protocolos de potabilización del agua, como también cronogramas y realización de análisis que garanticen la salud de la población de esas urbanizaciones.
Asimismo, a quienes todavía no se inscribieron en el Registro Único de Operadores de Servicios Públicos Sanitarios (RUOSPS), se instó a realizarlo en un plazo de cinco días hábiles para evitar las multas dispuestas por la normativa vigente.