Parece un lugar seguro, pero no lo es. A metros de la Avda. Irigoyen, un lugar muy transitado, con cámaras de seguridad en los postes, con el servicio penitenciario al frente y una comisaría cerca, los vecinos de Villa Soledad viven un infierno.
Exactamente en la esquina de Obispo Romero y Uriburu, vive Eduardo, el vecino que ante las cámaras de Multivisión Federal denunció que en la zona hay tráfico de drogas, personas que circulan drogadas durante todo el día y mucha prostitución.
El hombre relató un hecho que vivió en estos últimos días: “tengo la costumbre de tener siempre la puerta interior de mi casa totalmente oscuras, y ahí vi a dos hombres que, pese a la reja que tiene más de 2 metros, entraron trepando una pared y querían robar”, relató.
“Ingresé a mi casa y llamé al 911, y gracias a Dios encontré respuesta rápida, porque llegaron 4 motos con 8 policías en total. La mitad, subió a la plazoleta con sirenas y trataron de encontrarlos, mientras que los otros 4, rodaron el barrio también con sirenas para advertir a la gente”, siguió.
Contó también que su hijo fue hace unos días atrás a tomar un café, y en un segundo, le abrieron el vehículo en el que había llegado, le sacaron la rueda de auxilio y el estéreo, “solamente con el fin de hacer daño”, sostuvo.
Añadió también que todo el barrio tiene miedo, porque a la gente que baja del colectivo, le roban el celular a diario. Piden más seguridad porque no saben ya que hacer. Hay muchos ancianos, como él, que viven solos, y temen por su vida.
"Desgraciadamente en muy poco el personal policial que está por la zona, pero cuando lo llamamos, si vienen, pero muchas veces es tarde", dijo