Nadie se salva, y es realmente así, ya que robar un Centro Comunitario es algo inentendible para la comunidad que solo ve en ese lugar su bienestar.
El viernes por la noche integrantes del Centro detectaron que les habían sustraído todos los perfiles C que eran para terminar parte de la obra que encaran en el lugar con mucho esfuerzo y la colaboración de todos.
El sacerdote Maximiliano Goitia, a cargo de la comunidad pastoral, explicó “lo que sustrajeron fue el fruto de un año de esfuerzo de toda la comunidad, que aportó peso por peso para poder construir la capilla. Estábamos contentos porque íbamos a poder terminar de techar y con esto se nos vuelve cuesta arriba”, lamentó el padre.
Los perfiles robados son de 12 metros de largo y estaban guardados en el predio de la capilla, que aún está en obra. Para el sacerdote, se trata de un robo planificado y con logística, ya que se necesitan al menos dos personas para transportar cada perfil. Además, los ladrones lograron evadir la vigilancia de la comisaría, que está a solo unos pasos de la capilla.
El padre Goitia explicó que, con recursos propios, podrían recuperar cinco de los 12 perfiles, pero que necesitan ayuda para completar el techo y el contrapiso de la capilla. “Es difícil, pero yo creo que entre todos y haciendo redes podemos. Yo rezo para que aparezcan estos perfiles, los 12 o al menos 10. Y también rezo por ese grupo de personas que no sabemos quiénes han sido, pero no queremos el daño para ellos. Solo quiero que lo que han sustraído vuelva de alguna otra forma y que ellos puedan abrir un poco el corazón”, concluyó el sacerdote por Valle de Lerma Hoy.